Se agravó el conflicto que paraliza a los hospitales públicos de Córdoba

La negativa gubernamental a reabrir la mesa de negociación salarial agravó el conflicto que desde hace siete semanas mantienen los trabajadores hospitalarios de Córdoba, convirtiéndose así en el más prolongado y extendido desde la recuperación de la democracia en 1983.

Ante la falta de diálogo con el gobierno y el anuncio de que les descontarán los días no trabajados, médicos, enfermeras y empleados administrativos de los 22 hospitales públicos de la provincia ratificaron ayer la continuidad de la huelga que desde mediados del pasado mes de septiembre paralizó la atención de miles de pacientes.

En todos los nosocomios estatales del territorio cordobés se realizan únicamente las guardias mínimas y se atienden urgencias y emergencias, pero hace casi dos meses que no se abren las puertas de los consultorios.

La medida de fuerza fue declarada por la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS), una agrupación gremial que carece de personería gremial pero que en los centros sanitarios estatales tiene mayor gravitación que el Sindicato de Empleados Públicos (SEP).

El titular de UTS, Carlos Altamirano, repudió el criterio gubernamental de no reabrir la mesa de negociación salarial y confirmó que nacionalizará el conflicto, ya que el próximo jueves encabezará una protesta callejera frente a la Casa de Córdoba en la Capital Federal.

En diálogo con la prensa, el dirigente advirtió además que en caso de confirmarse la versión sobre "descuentos masivos" en los salarios de los profesionales de la salud, agravarán aún más las medidas de fuerza con la "ocupación de las direcciones y las oficinas de personal de todos los hospitales".

Mediante un comunicado, el Gobierno informó hoy que "tal como lo establece la ley" el derecho de hacer paro está garantizado, pero que, a la vez, "es obligación de la Provincia descontar los días no trabajados", por lo que tanto los trabajadores hospitalarios como los empleados públicos cobrarán los sueldos de octubre con sustanciales reducciones.

Por su parte, el Sindicato de Empleados Públicos (SEP), que hace un par de semanas se sumó a las demandas de mejores salarios que vienen planteando desde el sector salud, confirmó las "asambleas permanentes" en todas las reparticiones provinciales y ratificó el paro con movilización previsto para el próximo viernes.

Fuente: Télam