“La comisión de Obras Públicas otorgó despacho definitivo, luego de su pase por Gobierno, a la modificación de la ordenanza Nº 6.543 que corresponde al Código del Tránsito, al reglamentar la utilización de vidrios seguridad en vehículos automotores. Como máximo grado de tonalidad se autorizará el “intermedio””, sostiene un parte emitido hoy por el Concejo Municipal de la ciudad de Rosario.
Sólo podrán colocar láminas “las empresas y particulares debidamente habilitados” y en el marco de lo establecido en la ordenanza. El proyecto fue ampliamente debatido e incluyó modificaciones planteadas por la edila del bloque Socialista, Mariana Alonso.
El proyecto original fue presentado por el edil de Intransigencia y Renovación Radical (IRR), Jorge Boasso, y plantea prohibir “la colocación de elementos que dificulten la visibilidad del parabrisas y demás vidrios de seguridad del vehículo y/o la aplicación de elementos no autorizados o que no contemplen los requisitos de este anexo”.
La reunión fue presidida por el concejal del Partido del Progreso Social (PPS), Héctor Cavallero, y estuvieron presentes el edil de Convicción Radical “Arturo Illia”, Gonzalo del Cerro; Mariana Alonso, del bloque Socialista; y Alberto Cortés, del Partido Socialista Auténtico (PSA)/Proyecto Sur.
La modificación de la ordenanza que ahora incluirá a los polarizados, señala que “las láminas de seguridad y control solar no serán utilizadas en el vidrio parabrisas delantero, excepto en forma de una banda o visera en la parte superior del mismo y que no exceda los quince centímetros de ancho”. En ese sentido, los elementos deberán garantizar la “adecuada visibilidad” y se podrán aplicar a toda la superficie de los vidrios laterales de conductor y acompañante, parabrisas traseros o lunetas.
Con respecto al máximo grado de tonalidad se autorizará el denominado “intermedio”, que deberá permitir distinguir desde el exterior del vehículo la silueta de sus ocupantes. “En caso de aplicarse en el vidrio parabrisas trasero o luneta se exigirá la instalación de espejos retrovisores a ambos lados del vehículo”, se expresa a través del proyecto presentado por Boasso.
Según el texto finalmente consensuado, la Municipalidad de Rosario a través de la Dirección General de Tránsito, confeccionará una oblea habilitante para determinar el grado de tonalidad permitido, denominado “intermedio”, y una cédula de identificación. La oblea o sello de agua y la cédula habilitarán a los vehículos a transitar por Rosario y deberán acompañar a la documentación exigible del vehículo.
‘La ordenanza que se está por aprobar está en desacuerdo con la ley nacional y los talleres no están en condiciones de emitir un certificado en caso de que el auto presente una lámina de polarizado‘, advirtió Franco, director de la Agencia de Seguridad Vial de la provincia, según publica hoy Rosario/12.

































