Frente a frente estuvieron un conocido de la víctima y el cuidacoches que, en un primer momento, fue detenido por la policía como posible sospechoso. Aparentemente, se habrían planteado contradicciones en el relato que ambos hicieron ante el Juzgado de Instrucción de la Primera Nominación. Por ese motivo se dispuso carearlos y no se descartan nuevas medidas en las próximas horas. Determinar quién pudo haber asesinado a Costa no parece tarea sencilla. De hecho, hasta el momento no trascendió que existan pistas firmes sobre este homicidio que causó estupor, no sólo porque se trataba de una persona conocida en los ámbitos estudiantiles, sino por la brutalidad del crimen. Una posibilidad es que la Justicia trabaje a partir de los entrecruzamientos de llamadas entrantes y salientes del teléfono de la víctima, lo que podría arrojar algo de luz sobre la investigación. Costa era muy conocido en el ambiente cultural y educativo, y apareció brutalmente asesinado en su casa de calle Chacabuco 2154. Cuando la policía llegó al lugar -luego de haber recibido un llamado en el que se denunciaba la extraña desaparición del docente-, lo encontró ahorcado con una corbata, atado de pies y manos. Pocas horas después, los investigadores detuvieron a un cuidacoches, pero pronto recuperó la libertad porque no surgieron elementos para incriminarlo con este crimen. Este hombre dijo que conocía a la víctima y que, incluso, había estado en una oportunidad en su casa. La policía dio con este cuidacoches luego de encontrar, en el domicilio del profesor, un papel con un número telefónico anotado. Una vecina de Alvaro Marcelo Costa dijo haber visto a un joven abandonar la casa del profesor poco antes de que éste apareciera muerto. Sin embargo, en una rueda de reconocimiento en la que se incluyó al cuidacoches, esta mujer afirmó que aquel joven sospechoso no se encontraba frente a ella. Del lugar del crimen el asesino se llevó una computadora, pero se desconoce qué información pudo haber estado grabada en ella. Otro elemento a tener en cuenta, es que los investigadores no descartan la posibilidad de que el asesinato fuera cometido por más de un delincuente. Sin embargo, hasta ahora sólo se tratan de hipótesis.

































