"Soy un militante justicialista de muchos años. Creo que el justicialismo me necesita dentro". Ésas fueron las primeras declaraciones del concejal Rafael López, que esta semana pasó de integrar el bloque Santa Fe es el Centro, al oficialista Frente para la Victoria.
"En estas elecciones tenemos que estar todos juntos. Fue una decisión propia y no tenía que consultar", dijo el concejal en referencia con su otrora jefe Oscar "Cachi" Martínez. Y continuó: "Creo que no le debo nada a nadie, más allá de la gente que me apoyó y me dio el voto".
Su ex compañero de bancada, Marcelo Ferreira dijo haberse enterado "por una comunicación telefónica". De ahora en más "va a tener que hacer valer su voto, en contra o a favor de las decisiones que tome el intendente", desafió.
Ferreira reconoció que "a Rafael le han incomodado algunas decisiones de protagonismo, pero quienes lo conocemos desde hace tiempo sabemos que estos enojos pueden ser temporarios". En caso de querer volver "tendrá los brazos abiertos, nosotros reconocemos en López un hombre de mucha militancia y él ha sostenido siempre que está del lado de la gente".
Consultado por el mismo tema, Oscar Martínez dijo tener un "gran afecto por Rafael López y él ha tenido la libertad de votar. Esto es un mensaje para quienes decían que yo mandaba a los concejales lo que tenían que hacer. Ellos han seguido fielmente nuestras ideas, y respeto la decisión que toma ahora", concluyó.
También opinó al respecto el concejal justicialista, Rubén Mehauod, que definió a López como "un compañero peronista que vino a integrarse a las filas del Frente para la Victoria". También aclaró que el cambio no tendrá "incidencia en la vida del cuerpo", y negó que haya existido un ofrecimiento de su bancada. "Si hubiese sido una cuestión así sería una falta de respeto hacia el concejal y hacia los demás", resolvió Mehauod.































