En 1860 se creó la Sociedad de Beneficencia, por medio de un decreto del gobernador Pascual Rosas, una institución de caridad dedicada a la dirección y vigilancia de las escuelas de niños de la ciudad y atención y cuidado de los hospitales.
Desde entonces encaró obras de caridad y bien público, que fueron apoyadas por las Hermanas de la Caridad (congregación de las hermanas del Huerto), a quienes se les encargó a educación en la escuela de niños y la atención en los hospitales de hombres y mujeres.
Después de una primera etapa, la Sociedad de Beneficencia proyectó construir un nuevo edificio, ya que el antiguo hospital no llenaba en forma suficiente las necesidades de una población que había sufrido un importante crecimiento demográfico.
Recibió en donación un terreno en 1899 de José Aldao y, el 25 de mayo de 1902, bajo el gobierno de Rodolfo Freyre, tuvo lugar la colocación de la piedra fundamental del hospital, que fue inaugurado el 9 de julio de 1909.
La construcción se inició con la Sala 1, pabellón Buenaventura, con su doble fila de salas, un total de 4 por lado. En la parte posterior, años después, se levantaron el Asilo y la Capilla. Posteriormente, cada una de las salas fue bautizada con nombres de médicos que se destacaron por su labor.
El edificio recibió varias transformaciones en su proceso de adaptación a las nuevas urgencias asistenciales, como las salas de Cirugía y Rayos. Dos obras merecen resaltarse: el Pabellón para Asistencia Sanatorial de Enfermos Pudientes, inaugurado en 1931, fuente de recursos para las finanzas del hospital y la Maternidad, que fue inaugurada en 1942.
En 1950 fue intervenida oficialmente la Sociedad de Beneficencia por los vaivenes de la política y devuelta su sede en 1962, así como sus bienes y el ejercicio de sus tradicionales funciones.
La Sociedad de Beneficencia es propietaria del inmueble del hospital y lo administró durante muchos años, hasta que decidió alquilárselo al Ministerio de Salud. Si bien, hoy en día, no interviene en la administración, siempre está atenta a las necesidades y solicitudes provenientes de los distintos servicios.
En 1995, y luego de una inversión de 4 millones de pesos financiados por el Banco Interamericano de Desarrollo (Banco Mundial) se realizaron distintas remodelaciones, tales como el ingreso a la guardia, el ingreso al público, conducción y administración, Traumatología, Consultorios Externos, Quirófanos, sala de máquinas, Maternidad, lavadero, comedor público, Rehabilitación Física, etc.. En 1996, el nosocomio alcanzó el nivel de los centros asistenciales mejor instalados para la atención del trauma, al inaugurarse el shock room.
En 1999 dependían del hospital 9 centros comunitarios y 1.112 personas. En su edificio funcionan distintos talleres y espacios como carpintería, herrería, costurero, lavadero, electricidad, gasistas, entre otros. Desde 2000 hasta la actualidad, se llevaron adelante distintas obras de remodelación en el hospital, en el que la mayoría de las salas son nuevas con todo su mobiliario e instrumental.































