Un taller virtual para los que están detrás de escena

A partir del martes 19 de mayo, a lo largo de seis encuentros semanales, se llevará a cabo el taller virtual “Introducción al lenguaje escenotécnico”, impulsado por el Centro Cultural Provincial, dependiente del Ministerio de Cultura, a cargo del especialista Demián Sánchez. El curso tuvo amplia repercusión: en apenas 24 horas, se completó el cupo previsto y dio lugar a que los impulsores planifiquen un segunda edición, que será informada oportunamente.

🌟▶️Taller virtual: Introducción al lenguaje escenotécnico. Con Demián Sanchez. . CUPO COMPLETO en 24 h. A las personas... Publicado por Centro Cultural Provincial Francisco "Paco" Urondo en Martes, 5 de mayo de 2020

La iniciativa, en la cual el disertante contará con el apoyo de los integrantes del equipo de técnicos del Centro Cultural, contempla las necesidades de formación integral sobre la iluminación y la puesta en escena, propiciando la integración entre las diferentes disciplinas artísticas y técnicas. Apunta a introducir a los alumnos en el análisis de esta práctica y en el conocimiento de su lenguaje para aportar otras estrategias que complementen la formación específica.

El interés que despertó este ámbito de formación se explica en que los seminarios de este tipo son infrecuentes, al igual que los textos sistematizados sobre las temáticas que se abordarán. De hecho, el propio Demián desarrolló un volumen, aun inédito, que resume las problemáticas que vertirá en el seminario. Que apunta, principalmente, a establecer una serie de pautas comunes relacionadas con el lenguaje escenotécnico.

Un vocabulario en común

“Hay un error muy frecuente que es decir que nosotros estamos tras bambalinas. En realidad, la bambalina es la pollerita que cuelga. Las telas laterales son las patas. Entonces si yo tengo que cumplir al pie de la letra eso de estar tras bambalinas me tendría que colgar. Se dice tras bambalinas porque se hace referencia a la zona de veda que está escondida”, cuenta Demián al iniciar la charla con El Litoral. De esta forma, hace notar que muchas veces la falta de un lenguaje claro respecto al trabajo de los técnicos, produce cortocircuitos con el resto de los que trabajan en la puesta.

“No había un lenguaje incorporado. Esto producía entre el técnico y el artista o director, conflictos de entendimiento. Y también una gran brecha para el artista, por no saber qué pedir o cómo pedirlo, por desconocimiento. Hay anécdotas hermosas sobre esto, de cosas que a uno le parecen básicas y el otro no tiene por qué saberlas. Es como si los dos habláramos castellano, pero uno con modismos chilenos y el otro en cordobés”, contó Sánchez.

Recorrido

De estas reflexiones surgieron los lineamientos principales del texto y del seminario. “Más allá de los nombres específicos técnicos y el detalle de cómo funcionan las cosas, tiene también la poética de mi recorrido como artista. Básicamente me defino como actor, pero en esta búsqueda de desarrollar mi profesión como actor, empecé a desempeñarme como técnico y llevo 25 años cumpliendo ese rol en el Centro Cultural Provincial”, agregó Demián.

La idea del seminario es sistematizar y avanzar hacia un “idioma común”. “Un espacio donde juntemos los caminos y a la vez compartamos un conocimiento de los sistemas técnicos que se trabajan”, explicó el disertante. Y añadió que el espacio está apuntado para todo el mundo, pero generó mayor interés entre escenógrafos, directores y gente que trabaja en espacios de gestión. “Está bueno, porque yo desarrollo, en parte, como debería trabajar estructuralmente una sala desde el aspecto técnico. También servirá para generar ámbitos de dialogo y actualización”, finalizó.

Formadores

Demián Sánchez destacó especialmente la posibilidad que tuvo de formarse con personas experimentadas en una disciplina que evoluciona en forma constante. Nombró, entre otros, a Líbero Piccone y Oscar Peiteado, además de “todos los técnicos, de todas las giras, de todos los teatros que pasaron por el Centro cultural durante estos 25 años”, comentó. “Vamos aprendiendo de la convivencia con otros técnicos. Son profesiones como del zapatero, que pasan de generación en generación. Así me formé yo, no había una carrera específica de técnico escénico. Recién ahora, desde hace 5 o 10 años se están haciendo especializaciones puntuales respecto a eso”, aseguró.