Vladimir Putin redobló la presión sobre Volodimir Zelenski y lo instó a viajar a Moscú si quiere una reunión bilateral. “Si Zelenski está preparado, que venga a Moscú y esta reunión tendrá lugar”, dijo el líder ruso en conferencia de prensa tras participar de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái en Tianjin.
Putin aseguró estar dispuesto a negociar, pero puso en duda la utilidad del encuentro. “Si la reunión está bien preparada, entonces estoy listo. ¿Pero tiene algún sentido?”, planteó, al tiempo que defendió las anexiones de regiones ucranianas bajo el argumento de “respetar los derechos de la gente” más que reclamar territorios.
En paralelo, volvió a oponerse a una eventual adhesión de Ucrania a la OTAN y advirtió que seguirá “luchando” si no se alcanza un acuerdo de paz. El mensaje se suma a los gestos de firmeza que exhibió Moscú tras la reunión de Putin con Donald Trump en China.
Zelenski, otra vez bajo presión por la propuesta de reunión en Moscú. Foto: ReutersLa voz de Lavrov
El canciller Serguéi Lavrov reforzó la postura al señalar que una paz duradera requiere reconocer los territorios bajo control ruso, entre ellos Crimea, Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón. “Las nuevas realidades territoriales deben formalizarse de conformidad con el derecho internacional”, afirmó.
Serguéi Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia.Lavrov pidió además un sistema de garantías de seguridad para Rusia y Ucrania que excluya la ampliación de la OTAN en la región. En sus palabras, Ucrania debería asumir un estatus “neutral, no alineado y no nuclear” para poner fin al conflicto.
Una negociación condicionada
Las declaraciones se dieron en el marco de los actos por el 80° aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, en los que Rusia participó con una delegación de alto nivel. La presión sobre Zelenski se combina así con un intento de Moscú de fijar condiciones estrictas para cualquier tregua.