Carolina "Pampita" Ardohain viajó a Punta del Este junto a sus hijos y su pareja, el polista Martín Pepa, para celebrar las fiestas y disfrutar del comienzo de la temporada de verano.
La modelo y conductora fue vista la madrugada del 25 de diciembre en la guardia de un sanatorio en Uruguay. La escena, captada por medios locales, generó preocupación entre sus seguidores. Sin embargo, fuentes cercanas confirmaron que no se trató de una urgencia médica propia.

Carolina "Pampita" Ardohain viajó a Punta del Este junto a sus hijos y su pareja, el polista Martín Pepa, para celebrar las fiestas y disfrutar del comienzo de la temporada de verano.
Todo parecía transcurrir con normalidad, hasta que la noche del 24 se convirtió en noticia: la conductora fue vista en la sala de espera del Sanatorio Cantegril, uno de los centros médicos más reconocidos del balneario uruguayo.
Las imágenes, difundidas y replicadas por diversos medios argentinos, mostraron a Pampita y Pepa acompañados por otras personas, entre ellas un adolescente. La situación, fuera de lo habitual en una fecha festiva, despertó especulaciones sobre un posible problema de salud.
Pese a la inquietud generada en redes sociales, fuentes cercanas a la modelo aclararon que Pampita no acudió por una urgencia médica personal ni de sus hijos, sino que se encontraba acompañando a un allegado que necesitaba atención médica.
En las imágenes se la ve tranquila, sin signos de angustia, lo que refuerza la idea de que su presencia fue en calidad de acompañante. Hasta el momento, no se emitió ningún parte médico oficial ni comunicado de prensa que detalle lo sucedido.
El joven que fue visto junto al grupo sería amigo de uno de los hijos de Pampita o parte del entorno familiar que viajó con ellos a Uruguay. Esta presencia reforzó la versión de que se trató de una consulta médica de rutina o una situación menor que no implicó complicaciones.
La conductora había arribado días antes a Punta del Este con su familia, como lo muestran imágenes difundidas por medios del espectáculo. Su plan era disfrutar de la Navidad en Uruguay, donde tradicionalmente suele pasar parte del verano.
Este episodio en la madrugada del 25 no alteró sus planes vacacionales, ya que no se reportaron posteriores apariciones en centros médicos ni nuevos indicios de preocupación.
La sorpresiva visita de Pampita a un sanatorio en plena Navidad generó múltiples especulaciones, pero todo indica que se trató de una situación menor y controlada. Como figura pública, cada movimiento suyo cobra relevancia, pero esta vez, su paso por la guardia médica fue simplemente para acompañar, no por una emergencia personal.
Pampita, una de las figuras más queridas y expuestas del país, ha demostrado en varias oportunidades su templanza frente a la atención mediática. Incluso en circunstancias como esta, donde la preocupación pública se genera a partir de una imagen, la modelo mantiene la discreción y evita declaraciones apresuradas, priorizando la privacidad de su entorno.




