El paro de 24 horas decretado por Atsa -Asociación Trabajadores de la Sanidad- se hizo sentir desde las 6 de hoy y alteró el ritmo diario de nosocomios privados de la ciudad. El sector resolvió la medida al no cobrar un incremento del 30 por ciento en el salario acordado en paritaria y luego de haberse cumplido los plazos; con el aumento, el sueldo básico del personal pasaría de 2.200 pesos a 3000 pesos.
En el sanatorio San Gerónimo, cuatro personas esperaban a media mañana poder realizarse estudios que tenían programados para hoy.
“Nos dijeron que nos lo iban a hacer así que acá estamos”, dijo un señor que vino desde San Justo.
En el nosocomio informaron que solamente atendían urgencias, se respetaban los exámenes predispuestos y que únicamente se suspendieron las cirugías.
Marcelo Lacco, integrante del directorio del Instituto del Diagnóstico afirmó en el mismo sentido la cobertura de la guardia de enfermería, dos en la urgencia central, dos en terapia intensiva y la misma cantidad en unidad coronaria. “Desde el viernes que sabemos de la huelga así que postergamos las intervenciones quirúrgicas”, mencionó el doctor.
Sobre el nivel de acatamiento de la medida, Lacco dijo que “se adhirió mucho personal pero el que quería seguir trabajando lo pudo hacer”.
“Sabemos que el aumento que pretenden lo van a tener porque ya lo han conseguido en otras oportunidades. Nos parece justo que reclamen pero un paro así hace mucho daño económico a todas las empresas de salud”, evaluó el director del Instituto y agregó que “acá cobraron todos los sueldos al día, el aguinaldo y todos los aumentos, igual nos acomodamos a lo que resolvieron”.
En el sanatorio Mayo, donde se reciben muchas consultas de la obra social Pami, la alteración era evidente. “Estamos de paro señor, vuelva a pedir el turno mañana”, respondió una recepcionista a un anciano.
Gustavo Perino, jefe de personal del Mayo, aseguró que también garantizaban la atención en la urgencia. “No estamos de acuerdo con lo que reclaman, la medida es un tanto excesiva, pero se respeta”, dijo Perino.
La encargada de la oficina de personal del sanatorio Santa Fe, Verónica Rotta, señaló a El Litoral que el acatamiento era bajo.
“Si bien las cirugías no se están cumpliendo porque no sabíamos cuánto personal íbamos a tener, en piso hay personal suficiente y trabajamos normalmente lo mismo que en la parte administrativa y de diagnóstico que trabaja con la guardia”, afirmó.
Desde Atsa
En representación de Atsa, la secretaria general del gremio Ramona Robles, aseguró que el acatamiento de la medida de fuerza sin concurrencia a los lugares de trabajo es alto en todo el país.
“Estamos respetando las guardias y atendiendo a los internados como lo estableció la federación y en el plenario de delegados. No consideramos que la medida sea extrema porque estaba avisado”, puntualizó.
A su vez la gremialista señaló que el pedido de aumento no es suficiente, pero es algo. Ahora, esperan que las partes accedan a abonar el incremento solicitado o que se sienten a negociar nuevamente.
Clínicas y Sanatorios
El titular de la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Santa Fe, Dr. Carlos Abraham, ante la consulta de El Litoral señaló que “desde hace varios días estábamos avisados por el gremio Atsa lo que nos permitió organizamos y de ese modo se suspendieron las cirugías programadas, se coordinó el trabajo y se mantuvieron las guardias mínimas. Fue de manera organizada”.
Al ser consultado sobre la disparidad en el acatamiento a la medida, Abraham explicó que “en realidad se trasladan situaciones particulares de cada lugar, de cada sanatorio” y agregó luego que “hay que comprender que el paro fue decidido en el orden nacional, la paritaria se lleva adelante en Buenos Aires y el gremio local acata la decisión de la Federación. Pero desde la Asociación de Clínicas procuramos establecer cierto orden, junto con el gremio, para evitar problemas sanitarios”.
Finalmente, el presidente de la asociación explicó que el paro en Santa Fe “es una adhesión a lo dispuesto por Fatsa que es la que empuja la medida de fuerza. La paritaria anterior terminó el 31 de julio y seguramente en agosto habrá alguna recomposición”, reconoció Abraham.
Apoyo de la CGT
La CGT Regional Santa Fe manifestó su apoyo al paro que los trabajadores de la Sanidad “se vieron obligados a realizar, ya que vienen reclamando desde hace varios meses una recomposición justa y legítima en sus salarios, sin obtener respuesta alguna”.
El secretario general de la CGT Santa Fe, Alberto Cejas, manifestó que “la situación que vienen soportando los trabajadores de la sanidad atenta directamente contra sus necesidades primarias y eso es inaceptable en un sistema democrático, cuyos valores fundamentales deben ser: velar por sus derechos, como también privilegiar al trabajador para asegurar la tan proclamada “justicia social”.
Por lo tanto, y debido a lo expuesto la CGT Regional Santa Fe y los sindicatos que a ella adhieren manifiestan su apoyo “incondicional para con los compañeros trabajadores de la Sanidad”.
































