Para el lado del tomate

Federico Aguer | faguer@ellitoral.com

Según el Ing. Agr, Juan Carlos Favaro, estos cultivos se implantan a partir de junio y julio, donde se transplantan los plantines al campo. “Después queda al aire libre, lo conducimos a un solo tallo a unas 6 o 7 floraciones, y desde hace unos 15 días iniciamos la cosecha. También se puede cosechar en otoño si se siembra en enero”.

Respecto de la caída del área sembrada, explica los fundamentos. “Hoy es un cultivo reducido porque es caro, requiere muchos insumos dolarizados, y además se ha achicado el área por la competencia de otras zonas. Se trata de un producto para el mercado interno, en la que varias zonas productivas del país compiten”, asegura en referencia a Corrientes y La Plata. “En Santa Fe se hacían 1.000 hectáreas y ahora estamos en unas 50”, dispara.

Favaro agrega que con su empresa implantan unas 15 especies vegetales y las 3 de tomate (redondo, perita y cherry). “El objetivo es aprovechar las oportunidades de los mercados cercanos, ya que los cultivos de hoja tienen malos precios en primavera, por eso apostamos al tomate, el pimiento, o el zapallito para esta época del año. Son cultivos climáticamente susceptibles”.

A nivel de mercados, están trabajando en competencia con La Plata. “A los mercados del sur los tenemos cerrados por los costos de flete, por eso operamos con el mercado local, Chaco y algo con Mar del Plata que es un mercado que entra a producir tomate en estos días”.

Por ahora, el precio es bueno. “Era mejor por las condiciones de un invierno frío, que hizo que las primeras floraciones hagan caer las flores y el rinde fuera bajo en el inicio de la campaña”.

Balances y deudas pendientes

Finalmente, Favaro reconoce que la zona nuestra decae en cuanto a la producción frutihortícola por la inundación del Salado (que afectó el 70% de la zona), y por las pedradas. “Pero tenemos un desafío que no hemos asumido, que es la incorporación de tecnología, en lo que estamos un paso atrás de otras zonas. Eso tiene un costo inicial de inversión, y por otro lado requiere de asesoramiento técnico, que es bastante pobre (al menos a nivel privado). Con el asesoramiento del sector público no alcanza”, expresa en relación a temas como el riego por goteo (es un condicionante fuerte para alcanzar rindes parejos), los invernaderos, las mallas de sombreo, o las telas anti heladas, “que se usan poco”: Y por la genética de mejor calidad. Hoy hay cultivares más modernos que los que nosotros estamos usando en la zona, que son de mejor rendimiento”.