"Fideo… Fideo…", el grito más fuerte en la final de la Copa América
Se fue por la puerta grande. Ganó todo lo que se puede ganar a nivel selección y en todos los torneos –salvo en este- convirtió goles en las finales. Angel Di María, el retiro de un crack. Messi lo invitó, a él y a Otamendi, a que juntos recibieran la copa.
"Fideo… Fideo…", el grito más fuerte en la final de la Copa América
“Nos acaban de ganar con la camiseta, hermano…”. El colega colombiano saludó, palmeó la espalda del enviado de El Litoral y se fue rápidamente en busca de esas explicaciones que se entienden de esta manera, cargando la “responsabilidad” a ese peso específico de la camiseta de los campeones del mundo y bicampeones de América.
Messi invitó a Di María y a Otamendi a buscar los tres la copa. Di María ya anunció que este fue su último partido; Otamendi perdió la titularidad y sabe que también está en el cierre de una carrera espectacular. ¿Y Messi?, “sé que estoy jugando mis últimas batallas”, declaró luego de la victoria ante Canadá, que clasificó a la selección para esta final.
Ángel Di María con la Copa América. Crédito: Reuters
La gran ovación se produjo cuando Scaloni, en el tiempo suplementario, resolvió la salida de Di María. Ya Argentina ganaba y necesitaba fortalecer el sector defensivo. Pero también quería que Di María recibiera la ovación más grande y emotiva. Ya Messi había lagrimeado en el banco de suplentes por esa lesión que lo obligó a salir y en una final, algo impensado para él. Ahora llegaba el turno de “Fideo”, un emblema, una verdadera leyenda que se va de la selección dejando un gran vacío y con las vitrinas llenas de copas y de gloria.