"A Independiente del Valle lo armó Daniel Silguero"

El “Lito” Víctor Alfredo Bottaniz es palabra autorizada para hablar del fútbol de Ecuador. Lo mismo ocurre con el “Loco” Eduardo Stelick. En este caso El Litoral consultó al ex Unión, desvinculado de Atlético Rafaela y hoy elegido por Gustavo Alfaro para buscar talentos para Boca en esta parte del mapa.

Con varios años en la famosa Liga de Quito, que acarició la gloria con el “Patón” Bauza, hoy el equipo de moda en Ecuador se llama Independiente del Valle que en muy poco tiempo volverá a jugar una final continental de clubes, en este caso la Final Única de la Copa Sudamericana el 9 de noviembre en la nueva Olla de Asunción del Paraguay.


La historia que “Lito” cuenta a El Litoral conduce a alguien que —como el querido “Huevo” Julio César Toresani— jugó en Unión, Colón, River y Boca: el también desaparecido “Rengo” Juan Daniel Tomás Silguero, uno de los entrenadores más capacitados y estudiosos que salió de estos pagos para dar vueltas por el mundo.


“Yo estaba en la Liga de Quito y me pidieron que recomiende un técnico argentino. Nunca dudé: Daniel Silguero era la persona ideal. Fue Silguero quien armó todo en el 2008, cuando el club prácticamente no existía. A losd los años, con la receta de Daniel, Independiente del Valle ascendió a la Primera División de Ecuador”, cuenta Víctor Alfredo Bottaniz.

“Es increíble: dos finales de Copa en menos de diez años. Se trata de un club chico, que ni hinchas tenía. Ahora, está de moda. Barcelona, Emelec, El Nacional, Liga, Macará...todos mueven más gente que Independiente del Valle. Ahora, el éxito le dio fama, dinero y también hinchas!!!”, enfatiza “Lito” con su humildad habitual.


“Te cuento algo, donde está el Valle y nació el equipo llueve casi siempre, imposible los campos de juego para entrenar. Por eso la cancha de sintético, con el pasto artificial. En esos años, Silguero tenía la Sub 20 y se venía a entrenar conmigo en la Liga con los pibes de Independiente del Valle”, dice el hombre que se quedó afuera del Mundial Argentina ‘78 con un tal Diego Armando Maradona.


Además de Silguero, el “Lito” elogia el trabajo que en su momento hizo el uruguayo Pablo Repetto, quien puso al club en la recordada final de la Copa Libertadores en el 2016.


Pero para Víctor Alfredo Bottaniz el pulmón de Indepediente del Valle, finalista de la actual Copa Sudamericana, tiene nombre y apellido: Michel Deller. ¿Quién es esa persona y qué hizo?. Así responden los colegas de El Comercio de Quito ante la consulta de El Litoral: “La clave de todo ésto fue una seria estrategia empresarial por parte de Michel Deller, empresario exitoso del país de la mitad del mundo, tienen a la escuadra a las puerta de la gloria. Deller es accionistas de dos importantes centros comerciales de Quito, y, junto a otros inversores, tomó las riendas de los negriazules con la idea de ver un negocio viable en el mundo del fútbol”.

Eliminó a Unión


Independiente del Valle igualó 2-2 como local ante Corinthians por la vuelta de la semifinal de la Copa Sudamericana y, por el 2-0 conseguido en la ida, se clasificó a la final del certamen.


El conjunto ecuatoriano, dirigido por Miguel Ángel Ramírez llegó al partido definitorio en una camino marcado por cruces contra equipo argentinos. Todo empezó en la primera fase, cuando eliminó a Unión de Santa Fe. Pudo revertir el 0-2 en la ida, y lo terminó ganando en la definición por penales.


En 16vos, en un global de 7-3, dejó afuera a Universidad Católica de Chile y en octavos a Caracas de Venezuela, con quien igualó de visitante, pero lo liquidó de local.
En cuartos de final se cruzó con Independiente de Avellaneda y la serie arrancó mal: cayó 1-2 en el Libertadores de América, pero le dio valor al gol obtenido de visitante cuando se quedó con el partido de vuelta por 1-0 y se metió en semis.


Metió el gran batacazo de la Sudamericana cuando derrotó al Corinthians por 2-0 en San Pablo. Más tarde, logró la igualdad de local este miércoles y está en la final.

Cambió el nombre y sus colores



La fundación del club se remonta al 1 de marzo de 1958, por José Terán, nombre importante porque el club, en homenaje, adoptaría su nombre en 1977, dos años después de la muerte de dicho fundador. Se pasó a llamar Independiente José Terán. Por ese entonces su indumentaria era de color rojo y blanco, inspirada en el Club Atlético Independiente, de Argentina.


El ascenso a la segunda categoría de Pichincha se dio en 1995. Los colores actuales, azul y negro, los adopta en 2006, cuando aún jugaba en esta división. Su debut en la máxima del fútbol ecuatoriano fue el 6 de febrero de 2010 con victoria 1-0 sobre el Manta. Por ese entonces nadie se imaginaba la historia que estaba por protagonizar el equipo oriundo de un valle aledaño a Quito, capital de Ecuador.


Una seria estrategia empresarial por parte de Michel Deller, empresario exitoso del país de la mitad del mundo, tienen a la escuadra a las puerta de la gloria. Dicha inyección de capital permitió constituir una empresa deportiva seria que contrató jugadores de otros clubes para que “la rompieran” en Independiente. Todo bajo claras reglas presupuestarias.


El finalista de la Copa Libertadores 2016 y Copa Sudamericana 2019 se transformó en una compañía limitada. Así lo afirma Santiago Morales, gerente de la escuadra:

“Nosotros siempre nos hemos ceñido a un presupuesto. Muchos jugadores no firmaban por el club por diferencias de 100 dólares y los dejábamos ir”.


La dirigencia del cuadro del Valle decidió adquirir los derechos de ciertos futbolistas, para luego venderlos. Uno de los casos de mayor importancia es el de Jefferson Montero, quien en 2009 se marchó al Villarreal en una cifra aproximada a los 700.000 dólares. Ahora milita en el Swansea, de la Premier League.


Así fue la estrategia que permitió la formación de jugadores que después exportan su futuro. Además, las divisiones menores de Independiente del Valle son reconocidas por ser las mejores del fútbol ecuatoriano. El club cuenta con un colegio para que los jóvenes talentos tengan una formación integral. Son 120 promesas que están allí. La inversión para esta ejemplar causa supera el 1,5 millones de dólares cada temporada.


Cabe resaltar que Independiente del Valle no cuenta con una hinchada numerosa, son pocas las personas que viven en el valle de donde nació este modesto club, que hace algunos años donó el dinero de las taquillas frente a River Plate, Pumas y Boca, más de 300.000 dólares, a las víctimas del terremoto que sacudió a Ecuador.

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