“Los días en que hay partido no se puede salir; los domingos es tierra de nadie. Hay que guardar los vehículos, no sólo por los robos, sino por los destrozos que hacen'' a la salida de la cancha. La voz de uno de los vecinos es la expresión de casi todo el barrio Sur, que cada fin de semana que hay partido en el Centenario debe recluirse en el interior de su vivienda. La misma crítica es expresada sistemáticamente por los usuarios del servicio público de pasajeros, que comparten el cole con la hinchada.
































