El presidente de "Hinchadas Unidas Argentinas" reivindicó a esa ONG

El dirigente kirchnerista y presidente de la ONG Hinchadas Unidas Argentinas, Marcelo Mallo, reivindicó hoy la organización que nuclea a barras bravas de clubes de Primera División y el Ascenso, y negó que la barra brava de Independiente haya recibido aportes provenientes de los gremios que lideran Hugo Moyano o sus hijos Pablo y Facundo.

"Reivindico totalmente a Hinchadas Unidas porque no hubo un solo accidente ni desmán. Fue un hecho histórico juntar a hinchas que se vivían peleando, pero cuando termine el Mundial seguiremos trabajando", sostuvo Mallo en declaraciones a DyN, y agregó: "Los muchachos que se quedaron allá son los que nos representan".

Nuevamente en el país, según sus dichos para atender cuestiones laborales, aunque con planes de retornar si el seleccionado argentino supera los octavos de final, Mallo enfatizó que "no existe" aporte económico ni del Gobierno ni de "ningún gremio" para Hinchadas Unidas.

"Que los muchachos de Independiente estén con (Pablo) Moyano es porque tienen una buena relación, porque es hincha de Independiente", contó el dirigente quilmeño, y espetó: "Acá no hay aporte económico de ningún gremio ni del Gobierno".

Es que en el encuentro de ayer ante Grecia se vio a Pablo Moyano ingresar al estadio junto a los barras de Independiente, mientras que a Facundo, el menor de los hijos del titular de la CGT, se lo vio realizando un safari junto a los hinchas del club de Avellaneda.

Más aún, Mallo estimó que el único mal trago fue la prohibición para que un grupo de barras de HUA, entre los que se destacaban los líderes de la hinchada de Independiente y Huracán, Pablo "Bebote" Alvarez y Emiliano Tagliarino, respectivamente, ingresaran a Sudáfrica, ya que "tres meses antes estuvieron sin problemas y no había razón alguna para negarles el ingreso".

"Lo que pasa es que en Sudáfrica leen la prensa argentina, que dicen cualquier cosa, pero nadie dice que deportaron ingleses, y casi nadie habló de lo que pasó en el amistoso previo al Mundial entre Nigeria y Corea (del Norte), donde hubo muertos y heridos", dijo, enfático, Mallo a esta agencia.

Pero está claro que el presente del proyecto mundialista de la ONG dista y mucho de lo que se pensó en sus inicios, y de los casi 250 barras que arribaron a Sudáfrica sólo queda un centenar, con mayoría de representantes de la barra de Independiente.

"Que varios se vuelvan tiene que ver con que pensábamos pagar entradas de 60 dólares y luego allá te encontrabas con que salían 250. Pero yo les dije que por lo menos estuvieron, que plantaron bandera y deben estar contentos, porque le demostramos a la sociedad argentina que no somos inadaptados", señaló Mallo.

Además, el dirigente quilmeño reconoció que la relación con las fuerzas de seguridad sudafricanas eran difíciles.

"Las autoridades son muy jodidas, a nosotros nos hicieron cuatro allanamientos. No vayas a faltarles el respeto a los policías de allá porque no andan con vueltas. Si hasta un periodista argentino tuvo un accidente automovilístico y todavía tiene un quilombo enorme", señaló Mallo.

Fuente: DyN