El arma con la que mataron a Correa es una 9 mm de uso reglamentario, que el mes anterior había sido denunciada como robada por el comisario Sosa, que se desempeña en el departamento Las Colonias. Para los investigadores, la pistola fue robada por la hija del policía, que a su vez se la regaló a Zamirri, que por entonces era su novio.
































