Nahuel Briones: de los "Milagros inútiles" a las "rosas en la Luna"
El compositor, productor, instrumentista múltiple y cantante se presentará en solo set, en el marco del festival “100 Primaveras”, con entrada libre. En diálogo con El Litoral, el artista repasó el cierre de la etapa de su disco pospandémico (incluyendo su reversión en vivo), las canciones que adelantan su próximo material, y otras experiencias enriquecedoras.
Nahuel Briones: de los "Milagros inútiles" a las "rosas en la Luna"
Este sábado, el festival “100 Primaveras” celebrará los 100 años del Mercado Progreso (Balcarce 1635) con shows musicales, ferias de diseño, actividades para las infancias y gastronomía, con entrada libre. Las actividades comenzarán a las 18; en cuanto a las propuestas musicales, a partir de las 20 Dylan Disquería estará presente en el patio del Mercado con su vinyl set.
Desde las 21 se presentará en el escenario la banda esperancina de ska Último Vuelo, con Chino Mansutti como artista invitado. También lo hará Crema, agrupación rosarina que combina sonidos provenientes del pop, hip-hop, R&B y rock; y los locales de Changuitos: banda de música latina formada en febrero del 2023 por Franco Giachino (percusión) y Lisandro Herbel (piano), con Maca Revolt como invitada para la ocasión.
El visitante porteño será el polifacético Nahuel Briones, en solo set. El Litoral aprovechó para retomar el diálogo con el artista, recorriendo el cierre de la etapa de “Milagros inútiles” y adelantando lo que se viene.
Conexiones
-¿Qué podés adelantar de tu set en “100 Primaveras”?
-Voy a estar tocando canciones de todos mis discos, solo guitarra y voz. Si bien es un espacio grande, creo que va a ser un concierto bastante íntimo. Esta es la segunda vez que voy a Santa Fe, y tengo muchas ganas de profundizar ese vínculo con la gente de allá.
-La primera vez fue en el Foyer del Centro Cultural Provincial.
-Sí.
-En el último tiempo sacaste varios singles con diferentes artistas, como Sofía Viola (“Dueño de tus noticias”), Mel Muñiz (“Gleemonex”), Chinoy (“Un abrazo masivo”) o Pepina de Palma (“Regalamos rosas en la Luna”). También te sumaste a canciones de otros, como Las manos de Filippi (“Humo”), Loto (“Todos los días son míos”) y el santafesino Chino Mansutti (“Nuevo intento”). ¿Cómo se fueron dando tantas colaboraciones con tantos artistas tan diferentes entre sí, y también de tu propuesta?
-Durante muchos años no quise hacer colaboraciones, tuve una carrera más solitaria, por decirlo de alguna manera; pero en un momento me di cuenta de que ya había tenido un recorrido de muchos años, que había conocido a un montón de artistas, y que no quería perder la oportunidad de grabar algo con ellos.
Entonces cambié el foco que tenía, de producirme solo y de hacer un montón de cosas solo, a empezar a interactuar con esta gente tan diversa. Hay una una realidad que me pasa con la música: cada vez que veo a alguien tocando en vivo tengo ganas de hacer eso.
Poder compartir con Sofía Viola, con Mel, con Papina, con Las Manos de Filippi y con otros artistas que van a salir está buenísimo, es súper enriquecedor.
-¿Algunas de estas canciones son parte de un próximo disco?
-Las canciones con Mel, Sofía Viola, Chinoy y Papina de Palma forman parte de un disco que va a salir el año que viene.
-¿Va a ser todo de colaboraciones o una parte?
-No es todo de colaboraciones, pero es un disco bastante acompañado.
-Decís que quedan algunas por revelar todavía.
-Sí, quedan algunas.
De casa al escenario
-Habíamos hablado cuando salió “Milagros inútiles” , que fue un disco muy de home studio, de la pospandemia: nació en home studio y lo expandiste reemplazando parte del material original; tenía una cosa de mucha intimidad. El año pasado salió “Explosión de estrella” que es la reversión de “Milagros inútiles” en vivo. ¿Cómo nació esta idea de decir: “De aquellas canciones que nacieron de una forma, publiquemos cómo están sonando ahora”.
-Es justamente por esto que estás diciendo: es un disco muy introspectivo, muy de edición; que no suena a que hay una banda tocando en vivo. Y me pareció que era interesante hacer una versión de ese disco que es tan inorgánico, y poder demostrar cómo hacemos para tocarlo, cómo se lleva eso al vivo.
De todas las canciones de mi repertorio, “Milagros inútiles” es el disco que más tuvo que adaptarse a la banda en vivo; y me pareció que era que en casi todos los casos ganó algo. Me parecía que era una pena no compartir eso con el público.
-Cuando recién había salido decías que la gente cantaba canciones de “Milagros inútiles” que pensaste que la gente no iba a cantar y funcionaron. ¿Cómo se encontraron con el público?
-No todas las canciones de todos los discos tienen el mismo recibimiento. Todos los discos tienen canciones que son mejor recibidas; me pone muy contento que, siendo un disco tan raro, tan experimental en relación a mis discos anteriores, haber logrado sumar unas dos, tres canciones al repertorio ese que pide la gente en mis conciertos. Eso quiere decir que pudo trascender un poco la reclusión y la soledad, y llegar a que alguien resuene con esos temas.
-“Explosión de estrella” abre con un instrumental, “Un tipo de Argentina”; que podría haberse llamado “Intro”, y se ganó ser un track y tener un título. ¿Cómo fue decir: “Mirá, esto no es sólo una intro, sino que tiene una entidad musical propia”.
-Lo compuse como intro de recital; me parecía que estaba bueno. Cuando era chico iba a ver mucho a los Cadillacs y hacían eso: arrancaban con un tema corto, instrumental. Y dije: “Yo también tengo ganas de tener eso para salir al escenario, para que se vaya acomodando el sonido, para que la banda se vaya acostumbrando”. Lo tocamos muchas veces, porque fue el tema de apertura.
Y en un momento decidí: “Bueno, ya está, se terminó esta etapa. Vamos a dejar de abrir los conciertos con este track”. Y ahí recién ahí tuvo un título y se consolidó como un tema nuevo, bueno, como un tema nuevo, como el primer tema del álbum.
-¿Por qué “Un tipo de Argentina”?
-Es una frase que quiere decir tres cosas en sí misma: una clase de país, un hombre de Argentina, o una clase de mujer de Argentina. Me parecía que estaba bueno, ya que era instrumental, que tuviera un título más infinito: que puedas masticarlo y mascullarlo durante la canción.
-Más polisémico.
-Sí, polisémico: qué buena esa palabra.
Nuevas experiencias
-Hablando de aperturas, hiciste un tema para “Pasaron cosas”, el programa de Ale Bercovich. ¿Cómo se dio la relación y la propuesta?
-Me invitó una vez a su programa, nos quedamos charlando: se ve que se generó una química ahí, pegamos una onda, nos llevamos bien, nos reímos durante la charla. Y ahí mismo me propuso: “Che, ¿no tenés ganas de hacer una cortina?”. Su programa tiene tres cortinas, era hacer una de esas tres cortinas todo el año.
Nunca había hecho una cortina de radio, y me gustó mucho porque me imaginé como si fuera una música de los primeros años de la radio; una cosa medio orquestal, lo-fi.
Estuvo estuvo buenísimo hacer eso y, si bien es una canción que no sumé a mi repertorio en vivo (quedó ahí en la radio) mi banda me pide tocarla. Así que vamos a ver si la sumamos.
-Participaste este año con un showcase en la Feria Circulart de Medellín, Colombia, en junio. ¿Cómo fue esa experiencia?
-Circulart es una feria muy importante, muy grande, a la que concurren músicos, productores, programadores, periodistas de distintos países. El hecho de poder presentarse ahí ya hace que un montón de gente de la industria, de la escena, te vea, está buenísimo. Y después también poder tender puentes y lazos con gente de otros lugares.
En la práctica siempre va a ser más sencillo hacer cosas adentro de tu país: eso ya lo tenés de algún modo... no digo resuelto, pero lo conseguís entre las personas que conocés. Pero para hacer una gira por México, por Colombia, por Perú, necesitas otro tipo de contactos que tenés que generarlos en estas ferias.
-¿Qué devoluciones tuviste?
-Estuvo muy bien, el concierto estuvo bueno. Estuve muy enfermo, viajé enfermo, y di el concierto con un poco de miedo: porque no había podido ensayar, porque tenía la voz mal. Y el concierto fue un momento mágico, como suele pasar en vivo: el escenario es anestésico y te regenera; no sé por qué pasa eso. Salí un poco asustado y estuvo buena la devolución de la gente que participó. Y también conocer a otros artistas de otros países estuvo bueno.
-Iván Noble, que es más grande que vos, ya de una generación con algunas ñañas más, dice: “Arriba del escenario no te duele nada”.
-Está bueno: la verdad es que si arriba del escenario te duele algo, quiere decir que te duele mucho: es algo que te está afectando mucho. También tiene que ver con cuestiones de la salud mental: podés estar muy deprimido, y arriba del escenario no.
Es un momento en donde estás jugando con la memoria y el espacio-tiempo con la gente. Es una experiencia loca, la verdad: la de ponerse a tocar o actuar adelante de gente. Es una performance muy antigua, increíble.
Cambio de ciclo
-En julio hiciste la despedida de “Milagros inútiles” en La Tangente. Cerrás el año el viernes 31 de octubre en El Emergente Almagro: se anuncia un “show largo”, invitados. ¿Qué se puede contar de esa fecha?
-Algo que está bueno que se sepa de esa fecha es que siempre que armo una lista de temas trato de no poner todas las canciones que pide la gente, sino también un poco las canciones que tenemos ganas de tocar.
Y esta vez, para cerrar el año, y como no estamos presentando un disco (ya despedimos “Milagros inútiles” y se viene un disco nuevo el año que viene), vamos a hacer un concierto que es una especie de “best of” (risas). Vamos a tocar todos los temas que más se piden de cada disco.
Es un concierto más popular: también las entradas están más baratas. Está más pensado para que pueda asistir gente que en otro contexto duda de si ir o no.
-¿Cómo es la agenda de acá a la salida del disco?
-Te voy a hacer re sincero: no tengo nada. Por ahora estoy muy tranquilo, porque estuve terminando el disco y quería dedicarme a eso; así que me encantaría el año que viene presentarlo con una gira (y seguramente lo hagamos). Pero por ahora no hay nada organizado, lo haremos en los próximos meses.
-¿El disco ya está terminado?
-Le falta muy poquito, está casi terminado.
-¿Hay alguna fecha de salida?
-Probablemente sea marzo: me gusta, es un mes en el que arrancan las clases (risas).