"Con el Boletín Oficial digital cambiamos una modalidad que venía desde 1914"

Recientemente el Poder Ejecutivo Provincial registró la Ley Nº 13.936 de la diputada socialista Clara García (PS) por la cual se crea el Boletín Oficial Provincial Electrónico de Santa Fe (Bope) a publicarse en formato digital en medios electrónicos del Gobierno de la Provincia de Santa Fe. El Bope publicará en formato digital en medios electrónicos del Gobierno de la Provincia y revestirá carácter oficial y auténtico y producirá idénticos efectos jurídicos que la edición impresa.

Para conocer detalles de la implementación de la ley -para el que el Ejecutivo dispone de 180 días-, El Litoral dialogó con la autora de la iniciativa para conocer los alcances y beneficios de la publicación digital y acceso virtual del antiguo Boletín Oficial.

Clara García señaló que “hay que entender que estamos cambiando una ley del año 1914. La necesidad jurídica de que el Boletín Oficial estuviese impreso en papel habla de un Estado absolutamente diferente al actual y que, sin embargo, en esta formalidad jurídica de los actos de gobierno, continuaba con una metodología absolutamente fuera de las prácticas de comunicación y de tecnologías que hoy disponemos”.

Agregó que “cambiamos a una ley que permita que todas las resoluciones oficiales tales como publicaciones de leyes, normativas, licitaciones, avisos judiciales y avisos de gobierno, tengan validez en formato virtual. Lo cual implica tener como una extensión de lo que son los horarios y las limitaciones físicas que provoca tener que recurrir a la impresión en papel y a diversas reparticiones, para pasar a tenerlo online las 24 horas con la misma formalidad jurídica”.

La legisladora del Frente Progresista sostuvo que “el Boletín Oficial aparece entonces como un escalón más de toda una serie de eslabones de lo que se llama Gobierno Abierto. Un gobierno que trabaja en transparencia y en comunicación con nuevos métodos y abre esos datos y esa información a toda la comunidad. Santa Fe disponía desde hace tiempo la autorización para la llamada firma digital, dentro de esto que llamo ‘el recaudo’. Quién sube y quién se hace responsable de que esa información esté en un medio digital y sea correcta. Para eso se instrumentó la firma digital. También se está usando el expediente electrónico en otras áreas y faltaba dar este paso que tiene algunas aristas que hacen a la modernización del Estado, transparencia, procesos virtuales, accesibilidad y también, tiene una consecuencia medio ambiental porque la impresión del BO insume anualmente diez toneladas de papel, lo que implica unos 150 árboles que ganamos para no utilizar su pulpa, más la energía, más el transporte para el traslado de las 10 toneladas de papel”.

García expresó luego que “otra de las practicidades es que hoy todos nosotros lo referenciamos en el resto de la vida económica y cotidiana, académica universitaria para estudiar las leyes o profesional para munirse de la información, hoy, insisto, es absolutamente normal recurrir a lo digital” y planteó lo ocurrido en la transición al recordar que “sin ir más lejos en la primera semana de diciembre votamos un grupo de leyes con la anterior composición de la Cámara y recién se conoce el decreto a mediados de enero. ¿Por qué? Porque todavía no estaba publicado en el Boletín Oficial. Entonces todo este tiempo, si bien no había una urgencia por delante, hubo una demora considerable. Esto contrasta con la posibilidad de subir de modo automático los contenidos sin tener que esperar el proceso industrial para que la imprenta lo haga a través de la Imprenta Oficial. Así se gana en celeridad, en motores de búsqueda -porque estamos tan acostumbrados a que nuestra búsquedas sea en modo virtual- genera esta facilidad”.

Progresión

Clara García expresó que “ahora hay 180 días para que el gobierno la promulgue y para que vaya haciendo una incorporación progresiva, porque como referí, aquí se incluyen leyes, decretos, resoluciones, licitaciones más todo lo que incluye por el Registro Público de Comercio, como balances, asambleas; más los edictos de orden judicial. Por eso entendemos que el gobierno establecerá una gradualidad en la puesta en marcha de la ley y, al mismo tiempo, una gradualidad para dar de baja la ley vieja de 1914”.

Advirtió luego que “hoy los santafesinos disponemos de un Boletín Oficial en la web pero no tiene la validez jurídica que dispone el papel. Las leyes, por caso, allí están subidas. Pero previamente han tenido que pasar por la impresión fisica para otorgar validez y es lo que va a obviarse. Esto forma parte de un concepto de gobierno abierto y de información abierta a disposición de todos. Yo creo que les pasa a nivel periodístico cómo acceden o no para tener los datos de una manera maleable, manejable y transparente”.

Recordó que en la anterior gestión de Miguel Lifschitz al referirse a cuestiones de datos abiertos y disponibilidad de información “nosotros habíamos conformado una mesa de datos abiertos -porque hay muchas instituciones que trabajan en la transparencia- y en cuestiones tan simples como la información de un gobierno. Porque no es lo mismo para quien quiere trabajar en información tener planillas en formato pdf o en jpg, que tener el dato abierto que se puede bajar sin mayor inconvenientes para comparar y hacer gráficos, por ejemplo”.

OCDE y Cippec

La diputada provincial sostuvo que lo logrado en gestiones anteriores “es una actitud de transparencia de gobierno que no tenemos que perder ya que hay organismo nacionales e internacionales que califican a los gobiernos como la OCDE, por ejemplo, que tiene a Santa Fe en el podio de transparencia o el Cippec que nos coloca -junto con la provincia de Córdoba- en 9,55 puntos sobre 10 en términos de información abierta, fundamentalmente de orden económico que es la más sensible”.