"Acá no sobró plata, y la verdad que se hizo una muy buena obra pública"

En los últimos días se presentó el libro “Obras de Arquitectura” de la Municipalidad de Santa Fe, que representa el trabajo y brinda detalles de las principales construcciones impulsadas por el municipio entre 2011 y 2019. En esta recopilación se destacan los Jardines Municipales, las Escuelas de Trabajo, la puesta en valor de la Estación Belgrano, el Molino Marconetti, el Mercado Norte, el Metrofé, entre otras.

En este marco, el arquitecto Luis Bruno —profesor titular de la cátedra Arquitectura y Proyecto Urbano de la Universidad de Buenos Aires, UBA, y que fue decano de su Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo entre 2014 y 2018—, destacó el trabajo realizado en edificios y espacios públicos: “Con mis alumnos de arquitectura de la UBA viajamos todos los años a algún lugar federal donde haya una facultad de arquitectura. Este año elegimos Santa Fe y vine con 150 alumnos; quedamos fascinados de la calidad de la obra pública”.

Algunas de las edificaciones que ponderó Bruno fueron los Jardines Municipales como el de barrio Barranquitas; las Escuelas de Trabajo, la Mediateca, el Molino Marconetti y el Museo de la Constitución, así como también destacó espacios públicos como el bulevar de avenida Freyre, la Plaza 25 de Mayo.

“Son obras de arquitectura sofisticadas y de calidad, buenas para el ciudadano, que son como un premio. Son lugares que ofrece el Estado y que están por encima de la media de la calidad habitual de los espacios de arquitecturas”, ponderó, en una entrevista con El Litoral.

Con relación al valor que representa esta magnitud de edificaciones que se encuentren en una ciudad universitaria como Santa Fe, Bruno sostuvo: “Que haya tantas buenas obras de arquitectura es bueno para el aula, porque podes mostrar ejemplos de espacios que están en tu ciudad. El aula se realimenta, y muchos de los arquitectos que trabajan en equipos de los gobiernos salieron de la universidad pública de la UNL”.

En tanto, el arquitecto bonaerense resaltó los ocho años de gestión del intendente José Corral, en virtud de las obras realizadas. “La cabeza política tiene que entender que hay que hacer buena obra pública. Obviamente la obra sola no alcanza, tiene que estar enmarcada en buenos programas culturales, de educación; sino hay sensibilidad en todo no alcanza con la obra”, dijo.

También destacó al gobierno provincial por sus aportes realizados a la ciudad, en cuanto a la obra pública: “La obra pública municipal y provincial pone a Santa Fe en el mapa grande para convertirla en un gran destino turístico”.

Construir en plena crisis

“Los últimos años de Cristina (Fernández de Kirchner) y el mandato de Mauricio Macri, fueron decididamente negativos, y todas estas obras se hicieron en ese contexto económico”, analizó Bruno. “Hay muchas obras caras, pero hay obras que son sutiles, con presupuestos módicos y que le cambian la vida a la gente. Creo que un buen equipo de gobierno tiene que poder moverse con los presupuestos que se disponen. Hay que separar calidad de obra, a que si hay plata o no hay plata por momentos. Acá no sobró y la verdad que se hizo una muy buena obra pública, creo que se debería poner una vara para que el nuevo gobierno interprete la calidad de la obra realizada”.

Algunos espacios históricos que son un gran patrimonio edilicio para la ciudad —como el Molino Marconetti, la Estación Belgrano o la Manzana Histórica de la UNL— fueron restaurados y recuperados durante los últimos años. “Santa Fe tiene una mirada acertada con relación al patrimonio. El patrimonio hace a los lugares únicos: si vos tenés un suelo vacío y construís todo nuevo, puede que esté bien, pero la ciudad nueva de cero es una ciudad a la cual le falta historia. Lo que tiene el patrimonio es que te devuelve las huellas de la historia y creo que acá fue muy bien puesto en valor, algo que difícilmente se logre con una obra nueva”, concluyó Bruno.