Juan Ignacio Novak/ Mónica Ritacca
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Roberto vive en Centenario desde que nació, hace 81 años. Parado en la esquina de Zavalía y Mariano Cabal mira a su alrededor y no puede creer el progreso que tuvo el barrio. De ojotas, pantalón largo y una camisa gastada, contó que cuando era chico vivía en una casilla de madera y jugaba con sus amigos en los cañaverales que existían donde más tarde se construyó el Fonavi San Jerónimo. Sus recuerdos lo emocionan y, sin embargo, no se priva de traerlos al presente en la fecha que celebra hoy la jurisdicción: los 100 años de existencia.
A fines del siglo XIX, la ciudad fundada por Juan de Garay empezaba a transitar el camino hacia el progreso. De acuerdo con registros históricos sobre la historia del barrio, el Centenario era en sus orígenes un espacio natural donde abundaban árboles autóctonos y la fauna característica de la región.
Esas tierras que se conocían como paraje Las Piedras o la Fábrica de Candioti fueron más tarde propiedad de los señores Betemps y Bouvier, quienes primero decidieron lotearlas y luego lo hicieron en un reconocido café que se ubicaba frente a la plaza España. Tras ello, se realizaron los planos de urbanización, y mediante la Ordenanza N° 1.092 del 26 de octubre de 1910 se lo denominó Centenario en concordancia con los 100 años de la Revolución de Mayo de 1810.
Inmigrantes españoles, italianos, franceses, polacos y también pobladores de las islas lindantes y de otros barrios fueron los primeros habitantes del barrio. Varios años después, llegaron los puertos de frutas y verduras, el varadero de barcos propiedad de Carlos Sarsotti y la escuela Mariano Quiroga.
El progreso de barrio Centenario fue lento. El tendido eléctrico, que permitió la puesta en marcha de varias fábricas y comercios, llegó en 1933 y el agua potable a través de canillas públicas en 1940.
En 1943, el gobierno decidió la instalación del Escuadrón de Seguridad de Caballería, en Urquiza y José Hernández.
El barrio, hoy
Mónica Clapit es la presidenta de la vecinal Centenario. Muy emocionada por los 100 años del barrio señaló que la creación de la entidad en 1957 favoreció la llegada de beneficios. Entre ellos, el empedrado de calle Zavalía y posteriormente el asfalto, los desagües cloacales y el servicio público de pasajeros.
En la actualidad, son dos las obras más añoradas para que Centenario “esté bárbaro”: tareas de bacheo y la construcción de la casabomba Nº 0 para minimizar los anegamientos por lluvias. También la creación de una comisaría.
El sábado se realizó el acto oficial encabezado por el intendente Mario Barletta e instituciones de la zona. Los vecinos comenzaron a celebrar los 100 años anoche con una concentración en Fray M. Pérez y Malvinas y desde allí, a la hora 0 de hoy, partió una caravana de autos por todo el barrio. Los festejos continuaban hoy por la tarde, con un acto protocolar organizado desde la vecinal, el descubrimiento y bendición de una placa en homenaje “a los fundadores y actuales vecinos que con esfuerzo, dedicación y dolor hicieron posible el siglo del barrio”, entre otras actividades organizadas.
“Centenario fue el barrio de mi bisabuela, el de mi abuelo y el de mi padre. Ahora, es mi barrio, el de mis hijos y el de mi nieto. La emoción que siento, y que sentimos todos los vecinos, al ver que el barrio cumple sus primeros 100 años de vida es muy emocionante y este acontecimiento no podíamos dejarlo pasar”, finalizó la presidenta de la vecinal.
El Fonavi
Dentro de la jurisdicción de barrio Centenario se construyó el Fonavi San Jerónimo. Los 12 monoblock que lo constituyen en la actualidad fueron edificados en la década de 1980. Por entonces, ese sector estaba lleno de cañaverales, eucaliptos y arena.


































