Santa Fe será sede del II Foro Internacional de Género y Ruralidad junto a la 4ª edición de los Premios “Lía Encalada”
El encuentro, organizado por Mujeres de la Ruralidad Argentina y el Gobierno de Santa Fe. Reunirá a referentes nacionales e internacionales para debatir sobre igualdad en el agro y reconocer a mujeres que transforman la ruralidad.
Santa Fe será sede del II Foro Internacional de Género y Ruralidad junto a la 4ª edición de los Premios “Lía Encalada”
Santa Fe será nuevamente sede de un evento que pone en el centro a las mujeres del campo argentino. El II Foro Internacional de Género y Ruralidad, junto a la 4ª edición de los Premios “Lía Encalada”, se desarrollará este sábado, con la participación de productoras, lideresas, académicas, funcionarias y representantes institucionales de todo el país y la región.
La iniciativa es impulsada por Mujeres de la Ruralidad Argentina (MRA) junto al Ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano del Gobierno de Santa Fe.
El evento contará con paneles nacionales e internacionales, un bloque institucional sobre políticas públicas con perspectiva de género, y culminará con la entrega de los Premios “Lía Encalada”.
Un espacio para debatir y construir en igualdad
El programa incluye una conferencia marco sobre ruralidad en clave feminista, paneles con experiencias colectivas de mujeres en distintas provincias y una mesa regional con referentes de Bolivia, Uruguay y Colombia, donde se buscará avanzar hacia una agenda común de cooperación.
Además, se firmará un compromiso regional para promover acciones conjuntas en la reducción de brechas de género en la ruralidad.
Foro Internacional de Género y Ruralidad en Santa Fe.
Desde el Gobierno provincial, la secretaria de Mujeres, Género y Diversidad, Alicia Tate, destacó el valor de esta instancia:
“Para nosotros es muy importante acompañar estos espacios que fortalecen el liderazgo de las mujeres. Las mujeres rurales transforman sus comunidades, los lugares donde trabajan y también las estructuras que muchas veces las excluyen”, aseguró la funcionaria.
Brechas, desafíos y políticas públicas
Tate remarcó la necesidad de profundizar las políticas de inclusión y acompañamiento hacia las mujeres que viven y trabajan en el ámbito rural.
“Las mujeres rurales enfrentan una situación de desamparo: trabajan de sol a sol, muchas veces no son propietarias de la tierra ni acceden a beneficios previsionales. Además, sufren violencias en contextos donde el acceso a la justicia y a la conectividad es limitado”, señaló.
Por eso, explicó, es clave que conozcan los programas y dispositivos estatales disponibles en materia de género, prevención de violencias y acompañamiento productivo.
Paneles nacionales e internacionales abordarán experiencias y desafíos del sector rural.
“Así como ellas nos brindan información valiosa para mejorar las políticas públicas, nosotros debemos garantizar que sepan qué herramientas existen y cómo pueden utilizarlas”, sostuvo Tate.
Premios “Lía Encalada”: reconocer lo que transforma
Como cierre del Foro, se realizará la 4ª edición de los Premios “Lía Encalada”, que homenajean a la primera mujer ingeniera agrónoma del país y reconocen a quienes impulsan transformaciones en la ruralidad.
Las distinciones destacan trayectorias, impacto territorial y redes de colaboración en campos como la producción agropecuaria, la innovación, la educación, la comunicación, la salud y el liderazgo comunitario.
“Estos premios visibilizan y valoran el enorme aporte de las mujeres rurales. Son productoras, emprendedoras, artesanas y cuidadoras que sostienen la vida y la economía del campo argentino”, subrayó Tate.
Expectativas y respaldo internacional
Luego del éxito de la primera edición del Foro realizada en 2024, que reunió a más de 300 participantes, este año la convocatoria promete ser aún mayor.
Además, el evento contará con el respaldo de ONU Mujeres, que participará en la apertura con un mensaje de bienvenida.
El II Foro Internacional de Género y Ruralidad y los Premios “Lía Encalada” se consolidan así como un espacio de encuentro, reconocimiento y construcción colectiva para seguir promoviendo una ruralidad más justa e igualitaria.