Los primeros días de julio un agujero de importantes dimensiones quedó al descubierto en la esquina de Urquiza y Mariano Comas luego de que parte de la calzada cediera. El hundimiento de la calle, según narraron los vecinos en aquella oportunidad, no era nuevo y la existencia de "un problema de fondo" era evidente. "Como vecinos nos imaginábamos que algo pasaba, pero jamás creímos que iba a haber un pozo del tamaño de una habitación", decía Marita.
Días después de producido el socavón, El Litoral se comunicó con personal de la empresa Aguas Santafesinas SA. Desde allí se había explicado que, tras realizar como primera medida un by-pass de la cañería cloacal por encima de la calzada desde 4 de Enero y Mariano Comas hasta 4 de Enero y Cándido Pujato para desviar los líquidos y garantizar la continuidad del servicio, había que romper el resto de la calzada e ingresar al socavón para detectar el origen del problema y determinar si su reparación era competencia de Assa, por tratarse de un problema suscitado en la cañería cloacal, o de la Municipalidad, en caso de que fuera en la pluvial.>
Consultado en esta oportunidad, el vocero de prensa de la empresa, Germán Nessier, confirmó que el arreglo del socavón ya está en manos de Aguas Santafesinas, porque "hay que arreglar un tramo de una cañería cloacal de 300 mm de diámetro, situado en la intersección de Mariano Comas y Urquiza, que presenta una rotura como consecuencia de un desplazamiento del suelo en ese sector y de una variación de la altura de las napas freáticas durante la última inundación en la ciudad".>
"Para iniciar esta intervención, y de modo de asegurar la continuidad en la prestación del servicio de desagües cloacales en el sector, se dispuso como medida transitoria una cañería de by-pass superficial sobre calle 4 de Enero uniendo las cámaras de registro ubicadas en su intersección con Mariano Comas hasta Cándido Pujato", explicó Nessier. Y agregó: "Seguidamente se demolió por completo el asfalto de hormigón deteriorado, para acceder a la cañería dañada, y se aseguró la estabilidad del terreno con la colocación de tablestacas en la excavación, que se sumaron a las ya existentes".>
Cabe señalar que para facilitar la tarea de los operarios, días atrás se debió bloquear por completo el ingreso de líquidos en la excavación mediante la colocación de un tapón en la cámara de registro donde se encuentra la bomba que los impulsa a través del by-pass. A partir de ello, se pudo acceder a la excavación sin la presencia de líquidos para llegar a la cañería ubicada a casi cinco metros de profundidad y poder, en breve, reemplazar el tramo dañado de la cañería.>
La etapa final de los trabajos consistirá en la reposición de la tierra y su posterior compactación para luego restaurar las losas de hormigón armado que conforman la calzada.>
"En estas intervenciones en espacios confinados y profundos hay que trabajar con suma precaución y planificando cada paso al detalle para poder concluir con la mejor solución técnica", sostienen desde Assa, recomendando "prudencia a los automovilistas que transiten por el lugar debido a la reducción de la calzada y a la presencia de obreros trabajando".


































