Tanto en el caso de Jorge Minitti como en el de Alberto Maritato, los dos empresarios porteños mantenían una relación comercial de años con la familia Cardona.
En el primer caso el entregador era hijo de su amigo y cliente desde hacía al menos 30 año.
El padre de Gustavo Cardona había estado con Minniti esa noche, compartiendo una comida en su casa mientras miraban un partido de fútbol.
En cuanto al episodio anterior, el propio Gustavo Cardona dijo en Tribunales que conoce a Maritato “desde hace 14 años”, pero no se dio por aludido por el ataque.
Por otra parte, existen sospechas de un tercer caso que hasta el momento no pudo ser comprobado por la Justicia, a punto tal que la familia de uno de los imputados reconoce que hubo varios hechos de cobradores víctimas de asaltos.

































