La policía rosarina evitó el linchamiento de un hombre de 26 años, acusado de violar a una sobrina minusválida de 11 años, al retirarlo en medio de insultos y pedradas de la casa donde se encontraba parapetado y amenazado por la gente que pretendía lincharlo, informó la policía este miércoles. El operativo de salvataje incluyó un trabajo de distracción de los más de 300 vecinos que se habían agolpado en la vivienda de Cristian T., el hombre a quien se sindica como el abusador sexual de la niña, quien fue retirado de la vivienda por un pasillo contiguo y trasladado a una comisaría alejada del barrio. Enterados de la maniobra, los vecinos se enfurecieron, apedrearon a los efectivos y dieron vuelta un móvil policial, mientras que destrozaron los parabrisas de otros 14. La policía respondió con balas de goma, presuntamente disparadas al aire, aunque un hombre mostró una herida en su brazo. "Aquí se logró el objetivo de evitar que una persona fuera asesinada por linchamiento, lo que seguramente hubiese ocurrido si se permitía que los vecinos hicieran justicia por mano propia", justificó el inspector Jorge Wollschlejel, que intervino durante más de una hora para persuadir a los vecinos. El funcionario policial tomo intervención en el hecho luego de que un grupo de vecinos intentara linchar al denunciado, pasadas las 13.30, en la vivienda de Rueda y Cullen. El episodio se había iniciado por la mañana, cuando se radicó en la comisaría 32 una denuncia por violación. Enterados del caso, unos 300 vecinos se agolparon frente a la vivienda, con intención de hacer justicia por mano propia con el hombre, quien en un momento quemó sus propios colchones y se produjo cortes en el brazo y en el pecho. Fuente: Télam.

































