Juan Carlos Olave tiene recorrido un extenso camino con la camiseta de Belgrano. A sus 35 años, con más de 300 partidos como profesional, sigue sumando galardones personales, a nivel estadístico. Porque el domingo, cuando el “Pirata” reciba a Colón, el arquero cumplirá nada menos que 200 partidos defendiendo el arco del club de barrio Alberdi. No es poco mérito para un jugador que comenzó a tomar preponderancia y participación cerca de los 25 años, cuando debutara en Primera División, hace 10 años, por 2001, después de deambular por las canchas de la Liga Cordobesa con Las Palmas y en Bolivia, con Bolívar.
La historia del guardián de la valla del “Pirata” nace el 19 de agosto de 2001, cuando Carlos Ramacciotti le dio la responsabilidad de la titularidad para un debut nada menos que ante Boca Juniors en La “Bombonera”.
Apenas disputó un campeonato, ya que fue vendido a Gimnasia La Plata, convirtiéndose en la segunda venta del fideicomiso, con el club ya quebrado.
Tras pasos por Gimnasia La Plata, en las Copas Internacionales, y una transferencia a Murcia de España, volvió al país en 2005 para ser suplente en River Plate y para 2006 retornar a Gimnasia. En 2007, concretó su retorno a Belgrano, cuando militaba en la “B” Nacional entidad donde se mantiene aún y donde sueña retirarse de la actividad, según supo confesar a su grupo íntimo y en declaraciones periodísticas.
Disputó tres Promociones: perdió dos ante Rosario Central y Racing Club, aunque se quedó con la gloria del ascenso nada menos que ante River Plate.
Lleva disputada su sexta campaña en el arco celeste. Ante Colón, el domingo, tendrá su segunda centena defendiendo al club que le dio la oportunidad en el fútbol grande: 200 batallas, algunos sinsabores, tristezas, alegrías, revanchas, todo eso abarca en seis años de trayectoria con el “Pirata”.
































