Plan Divino en Santa Fe: una noche con los "himnos" de Charly y Fito
El show de la mega banda anticipa un encuentro con canciones que marcaron la identidad cultural argentina. Detalles una búsqueda estética que rehúye la imitación y apuesta por la interpretación.
Plan Divino en Santa Fe: una noche con los "himnos" de Charly y Fito
Las canciones de Charly García y Fito Páez tienen algo especial. Aunque algunas ya pasaron largamente los 30 años, siempre están ahí para decirnos algo sobre quiénes fuimos y quiénes somos. Entre los dos, escribieron buena parte de la educación sentimental de los argentinos del último medio siglo.
Quizás por eso el desembarco de Plan Divino en Santa Fe, que se producirá el próximo 5 de diciembre en Tribus Club de Arte (República de Siria 3572), abre tanta expectativa. Es que supone la posibilidad de reencontrarse con un lenguaje afectivo que permanece en plena vigencia.
La voz estará a cargo de Tiago Galíndez, ex líder de Piano Bar, y lo acompañará una formación completa: guitarras, teclados, bajo, batería, vientos y coros. Con la premisa de celebrar en vivo canciones que son "la banda sonora de nuestras vidas".
Archivo El Litoral
El ADN rosarino y la mesa compartida
La historia empieza en Rosario, donde nació el proyecto. Una ciudad que, para Galíndez, no requiere demasiadas explicaciones ni presentaciones. En este punto exacto arranca la entrevista con este medio, de casi media hora.
"A Rosario se la conoce casi como la Liverpool Argentina", dice, y enseguida profundiza esa comparación. "Desde aquí sale el rock en castellano con Los Gatos Salvajes. Rosario es el lugar donde germinó el rock en español. No es poco".
Esa marca registrada es, también, una responsabilidad para los músicos. "Uno sigue siendo parte de ese legado, de esa impronta cultural tan importante que se ha hecho una marca mundial".
Gentileza Luis Frontini
Y si hay un artista que encarna esa pertenencia, es Fito Páez. "Obviamente, estando Fito dentro del tándem de artistas que vamos a interpretar, hay un componente de rosarinidad muy grande, porque Fito es el hijo pródigo de la ciudad", afirma.
Es que, para Galíndez, Fito convirtió su ciudad en una metáfora universal. "Pintando Rosario, pintando su pueblo, lo llevó a todos lados. Y nosotros somos, de alguna manera, una continuación de eso".
Interpretar sus canciones implica moverse en un terreno familiar. "Para nosotros es natural, pero al mismo tiempo Fito lo hizo universal. Y a la gente le pasa lo mismo: estas canciones son propias, están en el argentino".
Gentileza producción
La contraparte es Charly, pura argentinidad porteña. "Creo que Charly es 100% porteño. Cuando voy a cantar a Buenos Aires siento que es local, muy fuerte, muy querido y respetado. Me animo a decir que es profeta en su tierra", afirma Galíndez.
Sin embargo, hay una decisión que explica por qué el show gira alrededor de ellos. "Charly y Fito tienen una continuidad. Es un juego que se juega sobre una misma mesa conceptual de la música, de la letra, de la historia. Hablamos de dos tipos sentados en la misma mesa, jugando a las cartas".
Un repertorio que nunca se agota
Si algo distingue a Plan Divino es la amplitud de su público. Hay jóvenes que descubrieron a Charly y Fito en las plataformas, otros más grandes que crecieron escuchando"El amor después del amor", e incluso los que vieron a Sui Generis en vivo. Todos coinciden en algo: la emoción sigue intacta.
Gentileza Niko
"Después de los shows la gente me dice: 'Yo me acuerdo cuando salió Clics Modernos', o 'cuando salió el disco de Serú estaba en la colimba; no sabés lo que significó para mí'. Estas canciones fueron la banda sonora de tantas vidas que su poder es inacabable", explica el músico.
"Yo creo que estas canciones van al corazón. No hay artificio. Es simplemente poner en el aire estos sonidos que le hacen bien a todo el mundo", añade.
Ser parte de ese puente es un privilegio. "Es espectacular poder ser una especie de médium entre el artista con sus canciones y el público. Y como ya son clásicos, hoy tenés nuevas generaciones que escuchan a Charly y a Fito y se siguen asombrando".
Gentileza producción
Para Galindez, es algo que "se transmite de los padres a los hijos, de los abuelos a los nietos. Son 50 años de música, por lo menos, entre Charly y Fito".
Pero hay más, ya que "hubo un renacer del interés por ellos, con la serie de Fito, con 'El amor después del amor' reversionado y con Charly renaciendo de las cenizas. Es un milagro. Y se ve en la gente. Hay un interés renovado".
Ahí Tiago planteó una idea que podría ser como el ADN del espectáculo. "Son tesoros nacionales, son nuestra identidad, nuestra personalidad, nuestras historias. Te hacen sentir como si estuvieran hablando de vos".
La búsqueda estética
Plan Divino no propone hacer una imitación. La apuesta es otra. Galíndez lo explica así: "somos músicos interpretando la obra, o reinterpretrándola por momentos. El ejercicio es difícil, porque uno también es fan".
"Las versiones originales son increíbles. De ahí aprendemos. De ahí sacamos el material. Pero buscamos libertades para que la banda tenga su forma de llevar estas canciones hacia el público", remarca.
"Queremos transmitir otro tipo de espectáculo. Hay respeto por las versiones originales, por las grabadas y por otras que ellos hicieron en vivo, pero también jugamos con la apropiación", explica.
Gentileza Niko
Para el músico las dos horas del concierto no alcanzan para poder transmitir el enorme cúmulo de canciones. "El año que viene podríamos hacer otro show con otros 26 temas y sería igual de fuerte", subraya.
Una seguidilla de himnos
En el show de Tribus, "se van a encontrar con 'Seminare', 'Rezo por vos', 'El amor después del amor', 'Mariposa Tecnicolor', 'Dos días en la vida', '11 y 6', 'Cerca de la revolución', 'Demoliendo hoteles'. Los clásicos", dice Tiago.
La dinámica del show es arrolladora. "Arranca con cuatro canciones al hilo, una y una, y son todas demoledoras. Cuatro piñas que te dejan knockout", adelanta.
El resto del repertorio alternará himnos con "joyitas" del catálogo que la banda prefiere no revelar. "No quiero spoilear, pero la idea es ir profundizando, variando, probando. Ese es el espíritu", cierra.