La CGT dejó expreso su rechazo a la reforma laboral en el Senado
Los principales representantes de la central obrera asistieron a la reunión de comisión en la Cámara alta para expresar sus argumentos en contra de la iniciativa impulsada por el gobierno de Javier Milei.
La CGT dejó expreso su rechazo a la reforma laboral en el Senado
Las autoridades de la CGT fustigaron este miércoles contra la reforma laboral que impulsa el gobierno del presidente Javier Milei en el plenario de comisiones del Senado donde se discute el proyecto, y en la antesala de la movilización que tendrá lugar este jueves.
El primero en tomar la palabra fue Jorge Sola, uno de los integrantes del triunvirato y secretario general del Sindicato del Seguro, quien dijo que la iniciativa es inconsulta con "la enorme cantidad de empleadores que están esperando una modernización".
“El inicio de la ley bases pusieron período de pruebas y fondo de cese (..) para promover el trabajo: no generaron empleo genuino. El problema no es el cambio de la relaciones laborales, que sí hay que cambiarlas, pero entre los que tienen las fuerzas productivas y el trabajador”, expresó Sola.
Para el representante sindical, la reforma del Gobierno “tiene grandes problemas de constitucionalidad". “Solicitamos que esto no sea una discusión entre gallos y medianoches”, dijo Sola ante las comisiones de Trabajo y de Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda.
Los representantes sindicales señalaron que los trabajadores ni los empresarios fueron consultados adecuadamente sobre el proyecto.
En tanto, Jorge Arguello, de Camioneros, afirmó que la ley “es regresiva”. “No es una reforma, es una flexibilización laboral. No se genera más trabajo quintando más derechos”, argumentó el referente.
“Algunos sectores de los empresarios no quieren esta ley. No les sirve. Sacarle todos los derechos a los trabajadores me parece una locura y que estamos equivocando el camino. Entendemos que hay algo nuevo en el mundo, pero hay que discutirlo”, agregó.
El otro triunviro y secretario general de SEIVARA, Cristian Jerónimo, reiteró que la CGT no avaló en ningún momento el proyecto de la reforma laboral y dijo que no le aporta “nada al mundo del trabajo”.
“Sabemos que hay que mejorar ciertas cuestiones, pero no hay mejor que los trabajadores y la contraparte, los empresarios, para construir el mejor proyecto en el cual entienden las necesidades de las distintas actividades”, siguió.
Jerónimo se quejó porque el Gobierno libertario no los convocó para la discusión. También fustigó contra el Consejo de Mayo. “Han demostrado de vuelta que nos mintieron. Sin el aval del mundo del trabajo ellos avanzaron con un proyecto”, sintetizó Jerónimo.
Cordero defendió la reforma
Por su parte, más temprano, expuso el secretario de Trabajo, Julio Cordero, quien afirmó que el proyecto de reforma laboral conserva los derechos “esenciales de los trabajadores” y resaltó que se busca devolver “poder” al “empleador”.
Cordero hizo referencia a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, y luego se enfocó en defender el texto en una corta exposición introductoria que inició pasadas las 11 y que se extendía por la tarde.
El secretario de Trabajo Julio Cordero expuso en la comisión del Senado que conduce Patricia Bullrich.
"El proyecto de ley es equilibrado. Fue analizado durante mucho tiempo y se realizó con un pedido de Sandra Pettovello para que se conservaran los derechos esenciales. Este proyecto conserva los derechos esenciales de los trabajadores", dijo.
El funcionario afirmó que "para que haya una persona trabajando alguien tiene que contratarla". "La imposición no forma parte de la libertad de la contratación; y la libertad de la contratación tiene que tener reglas claras y permitan que haya un fomento, y no un estancamiento”, reflexionó.
Cuestionamientos
Iniciada la ronda de preguntas, fue el senador de Unión por la Patria (UxP), Mariano Recalde, quien abrió en una serie de interrogantes -de los más punzantes de la jornada- con eje central en el área de litigios, uno de los puntos de mayor controversia que une al sindicalismo con el Poder Judicial.
No obstante, Cordero defendió el texto y admitió que "está pensado de manera moderna para las PyMes" y "los trabajadores que quieren ingresar al mundo del trabajo".
"El trabajo existe en la argentina y es valioso, y cuando no tiene las característica de la legislación debe ser considerado como autónomo", dijo y siguió: “No hay detrimento al trabajo. El trabajo es un derecho y no se lo puede borrar al trabajador de un plumazo por la litigiosidad”.
Para Cordero, los cambios que apuesta a realizar el oficialismo en al materia fueron tergiversados, a su criterio, por un sector de la oposición: “Los otros cambios que se mencionaron se trata de interpretaciones que se han desviado que llevan a una solución que lo que hace es paralizar la contratación”, expuso.
“Efectivamente las normas laborales crean empleo”, dijo y se preguntó: "¿Queda claro que la relación laboral ya conlleva todos los derechos laborales del contrato de trabajo? La relación laboral ya tiene todos esos derechos".
E insistió en que "no hay detrimento de nada. Lo que buscamos es fomentar que las cargas no sean tan fuertes que lleven a las personas y trabajen de manera irregular. La irregularidad no está bien. Nosotros devolvemos el poder al empleador".
“Apunta a que cuando llegue el momento (de una salida o despido), las Pymes tengan la posibilidad financiera de poder afrontar esto en beneficio del trabajador. Lo esto intento hacer es regular ese tipo de relaciones. No está pensado para las grandes empresas”, resaltó.