El Arca del Sur busca una alternativa para evitar su cierre definitivo

De la Redacción de El Litoral
area@ellitoral.com

Con el cierre de la librería El Arca del Sur, la ciudad pierde un espacio de difusión de la cultura local que se dedicó a promocionar durante los últimos siete años a escritores y músicos de la región. “Llegó el momento de decirlo. Se viene pensando desde hace meses y mejor avisar ahora, con algo de tiempo. Luego, no se sabe. El día 30 de junio de 2015 a las 20 -7 años, 7 meses y 7 días después de su apertura-, cerrará el local de El Arca del Sur”, anunció días atrás en el perfil de Facebook de la librería su propietario, Alejandro Álvarez.

La conocida librería local que tomó su nombre de la revista literaria que publicó durante veinte años Álvarez, entre 1992 y 2012, no era un negocio con un objetivo comercial ambicioso. Más bien había puesto su énfasis en la difusión de hacedores de la cultura local y de esa forma logró cierto grado de sustentabilidad económica, con altibajos en distintos períodos de su historia. Una muestra de ello es su horario de atención al público: apenas dos horas por la mañana y otras dos, por la tarde. “Es que tengo que disponer del tiempo necesario para realizar otro trabajo y obtener recursos para sostener a mi familia”, argumentó Álvarez en diálogo con El Litoral, durante la visita realizada esta mañana a la librería que cerrará sus puertas el primer día de julio próximo.

Los números no cierran y la demanda familiar cada vez es más grande. Es por ello que el conocido librero, escritor y ecologista Alejandro Álvarez debió tomar esta drástica decisión. “Ya no será un espacio con horarios de atención al público y no hay, por ahora, nada más que agregar al respecto desde esta red social (pero en persona sí, como siempre)”, escribió en el Facebook. “Los que quieran conseguir el buenísimo material que aún queda en el local pueden venir hasta esa fecha en los horarios que ya conocen, antes de que se termine”. Y cuando menciona el buenísimo material hace referencia a artistas locales como el músico Tavo Angellini, el paranaense Negro Aguirre y otros autores que graban en sellos alternativos, o escritores locales como Alfredo Di Bernardo o Sergio Ferreira, por mencionar sólo a dos, siendo injusto.

Resistencia

Conocida la decisión, fueron cientos los mensajes de melancolía y aliento que le enviaron lectores, artistas y escritores locales, que calificaron a Álvarez como un “militante cultural”, en palabras de Eugenia Montti. “Qué gran pena”, dijo Mónica Russomanno. “Qué pena, qué lástima, qué dolor. Cada vez que una librería cierra, algo en este mundo loco está un poco peor. Lo lamento de corazón”, escribió Mariano Di Maggio.

La librería El Arca del Sur había abierto sus puertas el 23 de noviembre de 2007 con el objetivo de ser un punto de difusión de escritores y músicos alternativos de la región, “con un sello de autenticidad”, afirma Álvarez. Para entonces, la revista ya tenía 15 años de vida y había logrado el reconocimiento de los vecinos de la ciudad que la apropiaron rápidamente como fenómeno cultural. “El Arca del Sur conlleva la idea mítica de la nave que preserva lo esencial en épocas turbulentas. Cuando nació era el auge del neoliberalismo. Entonces fue una forma de resistencia cultural, con una mirada crítica cargada de poesía escrita desde esta lado del mundo”, sintetizó su hacedor.

El año pasado, la librería cerró sus puertas durante cuatro meses y fue totalmente restaurada. Cuando reanudó su actividad, coincidió con el inicio de la lucha de vecinos que se oponían a la instalación de cocheras soterradas en el parque Alberdi. Álvarez fue uno de ellos y reconoce que por aquellos días debió restarle tiempo y energía a la librería por una causa que creyó prioritaria. “Me desgastó mucho”, reconoció. El librero iba a dedicar ese tiempo a exposiciones y otras actividades que realizaría en el local, pero aquello produjo un quiebre temporal que incidió hoy en la decisión del cierre. Además, reconoce que “en los últimos meses las ventas cayeron”.

Ante la avalancha de palabras de aliento recibidas durante los últimos días en reclamo por la continuidad de la librería, Álvarez busca ahora una alternativa que evite el cierre definitivo. Para ello tiene pensado asociarse con dos organizaciones que funcionarían juntas en el mismo local de Yrigoyen Freyre 2935 y afrontarían los gastos. El Arca del Sur ya no funcionaría con la modalidad de una librería abierta sino por pedidos y con aperturas esporádicas “a modo de feria”, y lograr así que El Arca continúe aglutinando a la cultura santafesina.

El Arca del Sur, la revista

La idea fue incubada en la revista Mirada, que salió por primera vez en 1991, producida Alejandro Álvarez junto a Guillermo Siccardi, cuando eran estudiantes de Derecho. Luego salió la revista Inventario, que era una guía de auspiciantes y contenía en su interior un pequeño suplemento literario denominado El Arca del Sur. “En realidad nuestro interés estaba allí, pero como necesitábamos los recursos para hacerla la incluimos en Inventario.

Fue tal la repercusión lograda que me di cuenta de que tenía que editarla aparte”, cuenta Álvarez. Desde 1992, El Arca se editó de manera bimensual y gratuita, y ganó la atención de los lectores santafesinos. Y a partir del Nº 8 se formalizó con una tirada de 3 mil ejemplares, hasta su desaparición, en 2012. “La necesidad de atender el local fue exigiendo cada vez más, el tiempo para editar la revista ya no alcanzaba. Así fue que el número 172 se transformó en su última edición”, cuenta Álvarez. Entre los mensajes que recibió el editor cuando anunció ahora el cierre de la librería se “coló” uno que encendió la ilusión, aunque no quiso anticipar nada. ¿Volverá la revista en la primavera?

El Arca del Sur conlleva la idea mítica de la nave que preserva lo esencial en épocas turbulentas. Cuando nació era el auge del neoliberalismo. Entonces, fue una forma de resistencia cultural, con una mirada crítica cargada de poesía escrita desde este lado del mundo”
Alejandro Álvarez, librero

Ale, gracias por todo lo que has hecho y hacés para difundir y empujar los espacios y emprendimientos independientes, nada se pierde todo se transforma... y evoluciona cuando es genuino y con alma. ¡¡¡Abrazo grandote!!!”.
Luis Medina

¡¡¡Qué mal!!! Deberían abrirse muchos más espacios como El Arca, ¡no cerrar! Un lugar fundamental para la difusión de la música independiente entre otras muchas cosas”.
Ana Suñé

Es una pena. Pero conociendo a Noé desde hace tantos años, sé que seguramente en breve inventará otras aguas para que su Arca las navegue”.
Alfredo Di Bernardo

Gracias a ustedes por todo, una pena que pase esto, si hay algo que podamos hacer sólo avisen. Me daré una vuelta por ahí”.
Marta Castellano

Gracias Ale, por tantos libros vendidos, por tendernos una mano a los escritores locales; ¿quién podrá reemplazarte?”.
Roberto Daniel Malatesta