Buenas ventas, en el primer día del nuevo Mercado Norte

De la Redacción de El Litoral
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Anoche, Santa Fe recuperó una parte de su historia. Después de años de abandono, los puestos de verduras, frutas y carne volvieron a la nave central del Mercado Norte, un edificio que se terminó en 1929 y que a mediados de la década pasada parecía un enorme galpón sucio, silencioso y muy descuidado.

Esta mañana, los vecinos de barrio Constituyentes volvieron con sus carritos y bolsas. “A mi suegro le hubiera encantado verlo así. El vendía carne en uno de los antiguos puestos y le dolió mucho cuando se cerró”, contó María de Loréfice, en diálogo con El Litoral.

Jorge Zunino, que vivió en esta zona toda su vida, recuerda que en la década del ’50 la carne llegaba al mercado en tranvía. “Cuando se cerró, el barrio perdió algo muy importante. Quedó muy lindo”, reconoció, después de comprar unas verduras. “Está precioso y nosotros tenemos que responder viniendo y cuidándolo”, coincidió Delfina González.

Sonia Zampar, encargada de la cocina de la iglesia Los Agustinos Recoletos, le empezó a tomar el pulso a las compras: “Los precios son normales y la calidad te cuento mañana”.

Ésa es la historia que vuelve. Hoy arrancó la construcción de los lazos de confianza entre los vecinos y los puesteros, que será clave para que el mercado se consolide y recupere el movimiento que tuvo durante décadas. “Se está moviendo y nosotros tenemos muchas expectativas. La gente sobre todo viene a comprar productos frescos”, contó Alejandro Verdú, al timón del puesto Frutas de Itatí.

Los puesteros están en plena etapa de seducción de sus clientes. “Lo importante es que la gente vuelva. Y para eso tenemos que ofrecer buenos precios, calidad y una atención personalizada”, reconoció Doménico Amica, del puesto “Augurí frutas y verduras”.

El escenario ayuda. El mercado es luminoso y permite una circulación despejada. En los puestos, las verduras y frutas están prolijamente ordenadas y los clientes pueden circular entre los cajones, para mirar y tocar. Además, hay una variada oferta de carne, fiambres, dulces y productos regionales, que terminarán en los carritos de todos los que se tienten.

La inauguración

El proceso para reabrir el mercado llevó 6 años. El paso decisivo se dio en el 2009, cuando el municipio generó un proyecto de recuperación que fue seleccionado —entre 250 de otros gobiernos del mundo— para ser financiado a través de una subvención de 963.000 euros de la Comisión Europea (EuropeAid).

En el 2010, se habilitaron los locales exteriores y en agosto de este año abrió el supermercado Kilbel, ya en la nave central.

“Recuperar este mercado es recuperar un patrimonio, una tradición familiar, la vida y el esfuerzo de varias generaciones de familias; es el apoyo a la producción local, a los emprendedores, es volver a encontrarnos con la comida saludable”, destacó el intendente José Corral, en el acto de anoche.

El gobernador Antonio Bonfatti dijo que los santafesinos tienen la enorme suerte de que la Municipalidad no vendió este mercado, como sucedió en otras ciudades. “Hoy se lo puede recuperar como patrimonio histórico, porque es un edificio maravilloso, que tiene una calidad de construcción que tanto añoramos”, destacó.

16 millones
de pesos es el monto total de inversión que se desembolsó en este proyecto, según la estimación del municipio. El aporte central se consiguió a partir de una subvención de 963.000 euros de la Comisión Europea (EuropeAid).

Objetivo cumplido

Alfonso Diez Torres es el jefe de la delegación de la Unión Europea en Argentina, organismo que subsidió con 963 mil euros el proyecto de revitalización del Mercado Norte en Santa Fe. Su rostro serio no transmite el orgullo que sintió ayer durante la inauguración, pero sí lo confirman sus palabras: “Los objetivos se cumplieron y por encima de las expectativas”, dijo a El Litoral.

Eligieron financiar el proyecto porque les interesó, por un lado, la recuperación de un patrimonio histórico vinculado a parte de la historia europea y de sus inmigrantes, “que son quienes trajeron el modelo de distribución de alimentos en mercados”, resaltó. Por otro, “que fuera un emprendimiento para el comercio minorista, con creación de puestos de trabajo, y la idea de revitalizar socialmente la zona y generar vínculos humanos y sociales importantes entre los vecinos. Creo que ayer se demostraba con la excelente acogida que tuvo el acto de inauguración y la presencia masiva de vecinos”, afirmó.