La construcción del nuevo puente Santa Fe–Santo Tomé entró en una fase clave. Este jueves comenzó la colocación de las vigas longitudinales de 30 metros que sostendrán la estructura principal del viaducto, una de las obras emblemáticas de la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro para mejorar la conexión entre ambas ciudades.
Según informó la Dirección Provincial de Vialidad (DPV), la obra ya supera el 22% de avance. Este viernes, a las 8, el administrador general del organismo, Pablo Seghezzo, encabezará una recorrida técnica en la cabecera Santa Fe del nuevo puente para detallar el estado de los trabajos y los próximos pasos del cronograma.
Vigas de 30 metros y operativo especial de traslado
Las vigas fueron fabricadas en la provincia de San Luis y comenzaron a llegar a la capital santafesina en tandas de tres unidades a partir del 2 de diciembre. En total se instalarán 56 piezas, que se apoyarán sobre las pilas ya ejecutadas y darán forma al tablero sobre el que luego se montará la calzada.
Para la colocación se montó en la zona la máquina lanzavigas, que permite maniobrar cada elemento con precisión milimétrica. Se trata de piezas de gran porte, cuyo transporte requirió un operativo especial autorizado por la Dirección Nacional de Vialidad, con recorridos preestablecidos y cortes parciales de tránsito.
El traslado se inicia en San Luis, sigue por la Ruta Nacional 7 hasta Rufino, continúa por la Ruta Nacional 33 y se empalma luego con la Ruta Nacional A012 para finalmente tomar la autopista Rosario–Santa Fe. Durante todo el trayecto viajan “coches guía” que acompañan a los camiones y coordinan los desvíos necesarios.
Vista del terraplén de avance sobre el Salado, clave para sostener el ritmo de obra. Foto: Fernando NicolaMás de la mitad de las pilas ya ejecutadas
Desde la DPV explicaron que, en cuanto a la infraestructura del nuevo puente carretero, ya se ejecutaron 121 de los 136 pilotes previstos, 100 de las 136 columnas y 28 de los 42 cabezales. Estos tres elementos conforman cada pila, por lo que ya se completaron 28 de las 42 pilas proyectadas, es decir, más de la mitad de la estructura de apoyo.
En paralelo, se avanza con el terraplén de servicio paralelo al puente, que permite ejecutar la infraestructura en el cauce del río y facilita el movimiento de maquinaria pesada. Ese apoyo constructivo es clave para sostener el ritmo de obra previsto en el cronograma oficial.
Colocaron la primera viga en el nuevo Puente Carretero. Foto: Fernando NicolaTerraplén aprobado y trabajos sobre el río Salado
Sobre el cauce principal del río Salado, el plan original contemplaba trabajar sobre pontones flotantes. Sin embargo, el bajo nivel del río obligó a continuar las tareas desde el terraplén. Esta solución fue evaluada y aprobada por la Secretaría de Recursos Hídricos y por el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático.
El terraplén no cierra el curso del río: está conformado por una batería de tubos que permiten el paso del flujo de agua, pegado al estribo del lado de Santo Tomé. Sobre ese frente se ejecutan las pilas 1, 4 y 5, con la previsión de avanzar de manera sostenida hasta fin de año y consolidar la base del viaducto en esa margen.
La máquina lanzavigas coloca las primeras vigas de 30 metros del nuevo puente. Foto: Fernando NicolaCon el puente superando el 22% de avance, el montaje de las vigas de 30 metros marca el inicio de una etapa visualmente más evidente para vecinos y automovilistas. Cada tramo colocado acerca un poco más el momento en que Santa Fe y Santo Tomé recuperen un enlace moderno y seguro, pensado para acompañar el crecimiento de la región.