Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) elevó a las autoridades nacionales un documento con doce propuestas concretas para una reforma tributaria moderna, simple y orientada a la inversión productiva.
Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), presentó un paquete de medidas fiscales orientadas a modernizar el sistema impositivo, promover la reinversión productiva y eliminar distorsiones que, según la entidad, castigan al que produce, invierte y genera empleo.

Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) elevó a las autoridades nacionales un documento con doce propuestas concretas para una reforma tributaria moderna, simple y orientada a la inversión productiva.
El plan, denominado “Régimen de Incentivos Fiscales para la Inversión Agropecuaria”, busca —según la entidad— construir un sistema más equitativo y eficiente, que deje de castigar al capital productivo y otorgue previsibilidad para planificar a largo plazo.
Según CRA, el paquete de medidas “No busca privilegios ni excepciones sectoriales, sino igualdad de trato fiscal, racionalidad económica y previsibilidad jurídica.”
CRA plantea un esquema integral de medidas que van desde la eliminación total de las retenciones y otros tributos distorsivos, hasta regímenes de incentivo a la inversión y estabilidad fiscal.
Entre los ejes más destacados se incluyen:
Régimen de Venta y Reemplazo Agropecuario (VRA): permite diferir el pago del Impuesto a las Ganancias cuando el productor reinvierte el producido de la venta en maquinaria, infraestructura o tierras, evitando “castigar fiscalmente la reinversión”.
Amortización acelerada agropecuaria: posibilita deducir más rápido las inversiones en maquinaria o infraestructura rural, siguiendo el modelo de sectores como energía o minería.
Devolución y Traslado Acelerado del IVA en Inversiones Agropecuarias: propone que los saldos a favor por inversiones se reintegren en un plazo corto —por ejemplo, 90 días— o se compensen con otros tributos.
Derogación del Impuesto a los Bienes Personales sobre activos productivos: la entidad lo considera “inconstitucional, confiscatorio y distorsivo”, al gravar capital productivo y no renta real.
Actualización del régimen de IVA anual agropecuario: busca permitir la compensación intraanual de créditos y débitos fiscales, para aliviar el impacto financiero de la estacionalidad productiva.
Fomento del uso de fertilizantes: propone deducir la totalidad o el doble del valor consumido en fertilizantes del Impuesto a las Ganancias, con el fin de mejorar rindes y sustentabilidad del suelo.
CRA también plantea la necesidad de revisar o eliminar distintos regímenes y cargas administrativas que, según el sector, “reducen liquidez y competitividad”.
Entre ellos se destacan:
La readecuación del régimen de retenciones y percepciones (RG 830 y análogas), que la entidad considera “una de las mayores cargas administrativas y financieras del sistema”.
La eliminación del impuesto al cheque y del SIRCREB, por su carácter “regresivo y confiscatorio”.
Un régimen de estabilidad fiscal que garantice reglas claras por períodos prolongados, similar al de otros sectores estratégicos.
El documento concluye con una posición clara: una verdadera reforma tributaria “no puede limitarse a las retenciones”, sino que debe corregir distorsiones estructurales y crear condiciones que incentiven la inversión, la formalización y el crecimiento del empleo rural.
“Implementar estas medidas es una decisión de política pública estratégica: quien invierte, produce y genera trabajo no debe ser castigado por hacerlo”, sostiene CRA en el cierre del informe.
Con esta propuesta, la entidad busca abrir el debate sobre un nuevo marco fiscal para el agro argentino, que permita al sector potenciar su rol como motor de desarrollo y generador de divisas en la economía nacional.




