"Mientras Argentina atraviesa una crisis cambiaria que ha sacudido a los mercados alrededor del mundo, muchos residentes aquí se hacen la misma pregunta: ¿dónde está la presidente?". Así comienza el artículo del periódico estadounidense.
El New York Times relata lo ocurrido en los últimos días en nuestro país, haciendo énfasis en la devaluación, que llegó a su punto máximo en 12 años. Según los autores, Simon Romero y Jonathan Gilbert, esta situación generó incertidumbre en los mercados por la fragilidad que están evidenciando las economías emergentes.
Pero el eje del artículo es la reacción adoptada por Cristina Kirchner ante la crisis. "Mientras la moneda de su país comenzaba a desplomarse, ella anunciaba un subsidio para jóvenes en edad escolar".
"Luego, tras la mayor caída en el peso argentino desde el colapso económico de hace una década, la señora Kirchner se mantenía nuevamente al margen de la agitación, viajando a Cuba para asistir a una cumbre. Una vez allí, evitó referirse a la crisis casi en todo momento, prefiriendo enviar mensajes de Twitter sobre su encuentro con los nietos de Fidel Castro".
"Sólo más tarde escribió en Twitter algunos mensajes en los que atribuyó las turbulencias en el mercado argentino a las 'presiones especulativas' realizadas por grupos y bancos anónimos", agrega.
"La Inflación es tan alta que se convirtió en una cuestión política caliente, con economistas diciendo que excedió el 28% en 2013 y el oficialismo insistiendo en que fue 10,9%".
Ausencia presidencial
"Ahora, las recientes ausencias de la señora Kirchner de la escena política la dejaron sin mucha defensa pública y dispararon el debate sobre si está emergiendo un vacío de poder -un contraste notable con su fuerte presencia durante el resto de su presidencia. Hasta hace poco, los argentinos se habían acostumbrado a que ella apareciera ampliamente alrededor del país, hablando habitualmente en televisión y manifestándose prolíficamente en Twitter sobre cualquier cosa, desde la calidad de la carne argentina, hasta la importancia de reafirmar la influencia en la Antártida", afirma el artículo del NY Times.
"En una ráfaga de más de 20 mensajes de Twitter -continúa el artículo- el viernes a la mañana la señora Kirchner volvió a mantenerse al margen de las turbulencias cambiarias, y atacó a empresas de medios influyentes que la criticaron por la infrecuencia de sus apariciones públicas en las semanas recientes. Luego, en la noche del viernes, apareció en televisión saludando al príncipe Akishino de Japón".
"Con la inflación creciendo, modificó su equipo económico en noviembre, ubicando a dos jóvenes funcionarios en roles prominentes (...) Con la señora Kirchner evadiendo el ojo público y dejando a sus subordinados las explicaciones de los abruptos cambios en la política económica, muchos argentinos están enfurecidos".
Para graficar la difícil situación que atraviesa la mandataria, el periódico cita una encuesta de Management and Fit que da cuenta de una reducción de su imagen positiva de un 42% en noviembre a un 27% en enero.
"El declive del crecimiento económico respecto de los años del boom -dice la nota-, también está exponiendo a la señora Kirchner a fuertes críticas sobre su propia riqueza, que se eyectó desde 2003, cuando su esposo llegó al poder, de acuerdo a las declaraciones juradas presentadas en la Oficina Anticorrupción".
"El patrimonio de los Kirchner era de 2,3 millones de dólares una década atrás, principalmente como resultado de negocios inmobiliarios en la Patagonia, su bastión político. En 2010 su fortuna había crecido a aproximadamente 18 millones de dólares", agrega.
"Mientras muchos argentinos deben recurrir al mercado negro para comprar dólares, la expansión de su fortuna y el reciente silencio sobre los tumultos cambiarios están exponiendo a la señora Kirchner a grandes críticas", concluye el diario norteamericano.


































