No hace falta explicar nada: del mismo modo que él logró meterse en los corazones ajenos —el de los cientos de miles de hinchas de Colón—, el corazón futbolero propio de Antonio Ricardo Mohamed sufre desde pequeño con forma de “Globito”. Entonces, cada vez que sus obligaciones profesionales como DT de Colón se lo permiten, el “Turco” se pega una vuelta para ver a su querido Huracán.
Jugador, ídolo, goleador, entrenador, hincha, socio. Es que el “Tony” es, fue y será de todo un poco en Huracán. Como cuando decidió volverse de México, donde estaba dirigiendo con un contrato alto, para darle una mano, asumir como DT casi gratis y buscar él personalmente gente que ponga dinero para pagarle los sueldos a los jugadores. La historia más reciente es conocida: lo ascendió a Primera División, armó la base para la permanencia en Primera, se peleó con Babington una vez más y se fue. De Los Tiburones rojos del Veracruz de México a Colón.
El sentimiento de los hinchas “quemeros” es recíproco. “Si es por darle una mano al ‘Turco’, será la primera vez que queremos que Huracán pierda, sólo por él...”, llegaron a confesar algunos cuando Mohamed —como DT de Colón— enfrentó al club de sus amores.
Incluso, en el baúl de los recuerdos, muchos tienen presente una famosa jugada en Boca-Huracán en La Bombonera, cuando Mohamed vestía los colores xeneizes. La leyenda contará algo que nadie quiso afirmar: el “Turco”, solo frente al arco, no le quiso hacer un gol a Huracán, algo que le costó caro para su continuidad con la azul y oro.
En las plateas
Entonces, cada vez que la agenda sabalera se lo permite, el “Turco” Mohamed se pega una vuelta para ver a su querido Huracán. Hay que recordar, además, que su esposa Patricia fue la motivadora de la escuelita de fútbol del club “quemero” y que toda la familia Mohamed —los hermanos del entrenador, principalmente— simpatiza con Huracán.
Así, el hoy responsable técnico-táctico sabalero se hizo presente en las plateas de la cancha de Argentinos Juniors para ver a Huracán contra Boca, algo que fue permanentemente resaltado por las cámaras de la TV que emitían en vivo el partido. Con sus habituales lentes oscuros, el “Turco” vivió el partido como un hincha más. En esa zona, la de plateas, recibió el afecto de siempre de los socios del “Globo”.
Hasta allí, todo normal. Con Boca ganando 1-0, Huracán intentaba pero no podía. Y a los 30 minutos del complemento, de contragolpe, el pibito Gaitán con un derechazo puso el 2-0. Fue en el preciso instante que la popular del “Globo”, donde está la barra más bullanguera, explotó con todo y a puro grito: </Negrita>“Que vuelva el Turco, la p... que lo parió”.</fin-Negrita> A la ocurrencia de la tribuna, le siguieron los sectores de plateas “quemeras” en La Paternal.
Ubicado en la platea, con un grito hiriente que perforaba los oídos de Claudio Ubeda, el “Turco” Mohamed tomó una decisión rápida, que lo pinta tal cual es: habló algo con su esposa y se fue de la cancha. Rápidamente, abandonó la platea y se retiró cuando todavía quedaba un cuarto de hora para el final del partido. Luego, sobre la hora, el mismo pibito Gaitán clavó el tercero, que terminó por desatar la ira de los hinchas de Huracán.
No debe explicar nada
Después de Mohamed, llegó Ardiles y luego asumió la conducción Claudio Ubeda. Los problemas de cortocircuito entre el “Turco” y Carlos Babington fueron más que evidentes, algo que terminó por desgastar la relación y obligó a Mohamed a dar el paso al costado cuando tenía el respaldo de todos.
A diferencia de lo que podría ocurrir con otros nombres y en las mismas circunstancias, el “Turco” Mohamed no debe explicar nada. Todo el mundo sabe que es fanático de Huracán y va a la cancha como un hincha más, como cualquiera.
A pesar de ello, sabiendo lo que su nombre significa para los hinchas del “Globito”, ni bien comenzaron los cánticos pidiendo su vuelta, Mohamed se levantó de la platea y se fue de la cancha de Argentinos.
Tampoco hace falta aclarar que el “Turco”, como él mismo lo dijo en varias entrevistas, se siente muy feliz viviendo en Santa Fe y dirigiendo a Colón en Primera División.
Ahora su mente apunta, junto al resto del cuerpo técnico, a recuperar a los jugadores lesionados en este parate de 15 días, que lo tendrá a Colón volviendo al ruedo el viernes 12 de setiembre, a las 21.10, contra Banfield, en Peña y Arenales, jugando cuatro días después —martes 16, a las 15— contra Lanús en el Cementerio de los Elefantes.
De todos modos, conociendo cómo se maneja y sabiendo de sus códigos, lo que pasó ayer en Huracán-Boca lo puso mal. No sólo por el 0-3 de su querido Huracán, sino también a la hora de ponerse en el lugar de Claudio Ubeda. A esta altura, el “Turco” Mohamed no necesita que nadie le endulce los oídos, mucho menos tratándose de Huracán, que es su casa.






























