Netanyahu fue operado con éxito de hipertrofia benigna de la próstata

Tras su diagnóstico de hipertrofia benigna de próstata, conocido el 25 de diciembre, este lunes se llevó a cabo la cirugía programada para el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu.

La operación tuvo lugar en un contexto marcado por la guerra entre Israel y Hamás, que continúa desarrollándose en la Franja de Gaza.

Este conflicto se desencadenó el 7 de octubre de 2023, cuando un ataque masivo del movimiento islamista palestino dejó una profunda marca en suelo israelí, provocando una respuesta contundente por parte del gobierno israelí.

Según detalló el sitio DW, el enfrentamiento ha escalado hasta convertirse en uno de los episodios más sangrientos de los últimos años en la región, generando un clima de tensión constante y preocupación en la comunidad internacional.

En este marco, el estado de salud del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha cobrado especial relevancia, dado que es él quien encabeza las decisiones estratégicas de Israel en medio del conflicto.

Comunicado médico

El centro médico Hadassah de Jerusalén informó a través de un comunicado que Netanyahu fue sometido a una intervención quirúrgica para tratar una complicación médica derivada de una infección urinaria.

"El primer ministro se despertó de la anestesia y está bien. Fue trasladado a la unidad de recuperación y se quedará en observación en los próximos días", señalaron desde el hospital, llevando un alivio parcial a quienes siguen de cerca su evolución.

Una afección “común” en hombres mayores

La oficina del mandatario había anunciado previamente que Netanyahu fue diagnosticado con una infección urinaria el pasado miércoles 25 de diciembre, atribuida a una hipertrofia benigna de la próstata.

La hipertrofia benigna de la próstata (HBP) es una afección no cancerosa que hace que la próstata crezca más de lo normal. La próstata es una glándula del sistema reproductivo masculino que se encuentra cerca de la uretra.

Aunque este tipo de afección es común en hombres mayores y generalmente no representa un peligro grave, puede generar complicaciones si no se trata adecuadamente.

En el caso del primer ministro, la intervención buscó prevenir cualquier deterioro en su estado de salud que pudiera comprometer su capacidad para liderar al país en un momento crítico.

Sin embargo, no es la primera vez que Netanyahu enfrenta problemas de salud que lo llevan al quirófano.

En marzo, fue sometido a una operación para tratar una hernia, y en julio, una intervención de emergencia concluyó con la implantación de un marcapasos.

Estos episodios han suscitado preguntas sobre la capacidad del líder, de 74 años, para mantenerse al frente de las demandas de su cargo.