La Liga Santafesina de Fútbol atraviesa horas de máxima emoción y expectativa. El campeonato llegó a su tramo final con los tres equipos que pelean arriba en estado de gracia, sin margen de error y obligando a que todo se defina en la última fecha. Este sábado, Colón de San Justo, Sanjustino y Guadalupe ganaron sus respectivos compromisos y mantienen vivo un torneo que tendrá un cierre electrizante, con promesa de tribunas colmadas, corazones en vilo y una definición que ya se empieza a vivir como una verdadera final anticipada.
En el estadio de Colón de San Justo, el local. líder, mostró toda su jerarquía frente a Nobleza y se despachó con un contundente 4 a 1. El "Conquistador" impuso condiciones desde el arranque y dejó en claro por qué es uno de los candidatos al título. Con juego asociado, variantes ofensivas y un despliegue físico notable, el equipo de Miguel Restelli resolvió un partido que en la previa se presentaba complejo. La contundencia fue su sello y los goles llegaron en los momentos justos para no dejar dudas.
Mientras tanto, Sanjustino, el otro puntero, no se quedó atrás. En el Polideportivo de Sauce Viejo, el "Matador" enfrentó a Academia Cabrera y sacó adelante un duelo clave con una actuación sólida y convincente. Con un 3 a 0 claro, los dirigidos por Marcelo Molina volvieron a demostrar que el equipo está en su mejor momento. La presión alta, el equilibrio en el medio y la eficacia en los metros finales marcaron la diferencia ante un rival que no pudo encontrar respuestas. La hinchada de Sanjustino, no fueron muchos, celebró y empieza a soñar con dar la vuelta olímpica en su casa, o en todo caso, jugar un partido desempate ante su clásico rival.
Por su parte, Guadalupe, un poco más atrás, a un punto de los líderes, también cumplió con su parte en la pelea grande. El equipo se impuso 2 a 1 frente a Nacional en un encuentro duro, trabado y con final abierto hasta el último minuto. Con más garra que fútbol, Guadalupe supo sostener la ventaja y mantener viva la ilusión de meterse en la pelea hasta el cierre. El festejo fue desatado porque los jugadores saben que cada punto vale oro en este tramo de la competencia y que todavía tienen una carta por jugar en la definición.
Con estos resultados, la tabla de posiciones sigue apretada y todo quedará al rojo vivo el próximo fin de semana. El fixture no da respiro: Colón de San Justo deberá visitar a Vecinal Gálvez, un rival siempre incómodo, que no regalará nada en su cancha. Sanjustino recibirá a Pucará en el Polideportivo, donde buscará aprovechar el empuje de su gente para dar un paso decisivo. Guadalupe, en tanto, tendrá una parada brava como visitante de Unión, en un cruce que promete ser de dientes apretados.
La última fecha será, sin dudas, de alto vuelo. Cada partido tiene condimentos especiales y la definición no admite especulaciones. En caso de igualdad de puntos en el primer puesto, el reglamento de la Liga establece que el campeonato se definirá en un partido único. Esa posibilidad crece con fuerza y, si se da, el choque esperado sería nada menos que entre Colón de San Justo y Sanjustino, los dos gigantes de la ciudad de San Justo que hoy dominan el torneo.
La expectativa es enorme porque, si bien Guadalupe aún tiene chances matemáticas, todo indica que la definición se encaminará hacia un duelo mano a mano en San Justo. Restará ver qué ocurre en la última fecha, pero la Liga ya se prepara para un cierre que promete quedar en la memoria de todos.
En los pasillos de la Liga Santafesina ya se habla de la necesidad de organizar con precisión el operativo para un eventual partido definitorio. La ciudad de San Justo podría convertirse en el epicentro de una fiesta futbolera sin precedentes, con dos instituciones históricas frente a frente y una pasión que desborda en cada rincón. La seguridad, la logística y la capacidad de los estadios serán temas a tratar en la semana, una vez que la pelota termine de dictar sentencia en la última jornada.
El torneo viene regalando emociones fuertes desde el inicio, pero pocas veces la paridad fue tan marcada como en esta edición. La diferencia entre los candidatos es mínima y la regularidad mostrada por los tres de arriba explica por qué llegaron con chances hasta el final. Cada triunfo fue celebrado como una final, cada tropiezo dolió como una derrota decisiva, y ahora solo queda esperar un desenlace que ya se vive con la ansiedad lógica de quienes saben que cualquier detalle puede inclinar la balanza.
En este escenario, los entrenadores juegan su propio partido. Miguel Restelli, con la experiencia que lo caracteriza, sabe que su Colón de San Justo tiene la jerarquía suficiente para consagrarse. Marcelo Molina, en cambio, apuesta al ímpetu de un Sanjustino que viene aceitado, con confianza plena y el sueño de ser campeón. Guadalupe, desde atrás, se aferra a la ilusión y confía en que el fútbol siempre guarda sorpresas para quienes no bajan los brazos.
Las hinchadas, por su parte, ya palpitan lo que será un sábado inolvidable. Los colores, las banderas, los cánticos y la pasión popular le darán un marco único a una definición que excede lo deportivo y se transforma en una verdadera fiesta del fútbol de la región. Nadie quiere perderse lo que viene. La pelota está en juego y la historia está por escribirse.
Así está la tabla