A la 1:35 de este viernes, un llamado al servicio de emergencias de la Ciudad alertó sobre un grave incidente en un edificio del barrio de Palermo: un ascensor acababa de desplomarse desde el noveno piso hasta el nivel de la planta baja.
En la madrugada porteña, un ascensor cayó desde el noveno piso hasta la planta baja de un edificio ubicado en Arévalo al 2700. Diez jóvenes quedaron atrapados, fueron rescatados por bomberos y trasladados con politraumatismos a distintos hospitales.

A la 1:35 de este viernes, un llamado al servicio de emergencias de la Ciudad alertó sobre un grave incidente en un edificio del barrio de Palermo: un ascensor acababa de desplomarse desde el noveno piso hasta el nivel de la planta baja.
Según reportes oficiales, en su interior viajaban diez jóvenes que quedaron atrapados y debieron ser rescatados por los equipos de bomberos. Las víctimas sufrieron politraumatismos y fueron derivadas a distintos hospitales porteños para tratamiento.
A continuación, dos secciones que ayudan a comprender el desarrollo del hecho: primero la mecánica del desastre y el rescate; luego el estado de las personas afectadas y los pasos de la investigación.
El edificio implicado está ubicado en la calle Arévalo al 2700, en el barrio de Palermo. Las primeras informaciones indican que el ascensor se “cayó” desde el noveno piso hasta la planta baja, en una caída libre que dejó el gabinete del elevador totalmente fuera de su sitio.
Al llegar los equipos de emergencias, encontraron la estructura del ascensor colapsada y los jóvenes atrapados en su interior. En la escena actuaron dotaciones de bomberos, unidades del SAME y una unidad de triage. Se desplegaron, al menos, 11 ambulancias para asistir a las víctimas.
Los bomberos llevaron a cabo las tareas de estabilización de la estructura, aseguramiento del entorno y apertura del gabinete o acceso al interior del ascensor. También realizaron maniobras de extracción con cuidado para evitar movimientos bruscos que pudieran agravar las lesiones de los detenidos.
Hacia las 2:40 de la madrugada, los operativos de rescate aún continuaban mientras se aseguraba el perímetro del edificio y se controlaba la zona para prevenir nuevos riesgos estructurales.
La comisaría 14 B quedó a cargo de la investigación preliminar del incidente, con el objetivo de esclarecer las causas técnicas del desprendimiento del elevador. Se busca determinar si hubo fallas en el mantenimiento, defectos de construcción, sobrecarga o alguna otra eventualidad que desencadenara el siniestro.
Dentro del ascensor viajaban diez jóvenes —seis mujeres y cuatro varones— con edades estimadas entre 17 y 20 años.
Todos ellos presentaban politraumatismos como consecuencia del impacto y fueron asistidos por el SAME en el lugar.
Entre los heridos, una joven sufrió una fractura de fémur, lo que requirió atención especializada.
Los pacientes fueron trasladados a distintos hospitales de la Ciudad de Buenos Aires: Pirovano, Fernández y Rivadavia.
Hasta el momento no se informó que alguno de los heridos se encuentre en estado crítico, aunque la naturaleza múltiple de las lesiones obliga a un seguimiento médico riguroso.
En la esfera judicial y policial, la causa está abierta bajo la órbita de la comisaría 14 B. La investigación deberá analizar los registros de mantenimiento del ascensor, la empresa responsable del sistema y posibles fallas estructurales o de diseño.
También se investigará si la cantidad de personas (o peso transportado) excedía los límites permitidos para ese elevador, aunque no se ha confirmado públicamente que esa fuera la causa.
Esta mañana, la zona donde ocurrió el accidente continúa bajo custodia policial. Técnicos especializados podrían intervenir para estabilizar la estructura del edificio y levantar evidencias. La Municipalidad porteña, por su parte, podría requerir informes sobre la inspección de ascensores en ese inmueble.