La ola de violencia en Rosario no cesa

Un comerciante ultimado en un intento de robo, un joven ejecutado en un presunto ajuste de cuentas y un sujeto baleado en un enfrentamiento se sumaron tan sólo ayer a la trágica lista de muertos en enero en la ciudad de Rosario y sus alrededores.

A sólo 24 días de iniciado 2014, la cifra total de fallecidos durante el año se eleva a 29 casos. No obstante, fuentes policiales aclararon que cuatro de esas víctimas fatales habían sido heridas durante 2013 pero sus decesos se produjeron en enero, a raíz de las graves heridas sufridas.

Con motivo de la ola de crímenes registrados en esta semana, la Policía de Rosario informó que desarrollará un operativo de saturación en las consideradas "zonas rojas", para tratar de controlar la saga de homicidios.

Según se informó, participarán unos 100 agentes de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE), Seguridad Rural Los Pumas, mientras se sigue capacitando a aspirantes a conformar la Policía Comunitaria.

Ayer, por lo pronto, un comerciante de 54 años fue asesinado de un balazo en un intento de robo, en momentos en que abría su maxikiosco ubicado en el tradicional barrio Martín, macrocentro rosarino, y a una cuadra y media de la comisaría 1a. El hecho ocurrió alrededor de las 7, en la intersección de Mendoza y Juan Manuel de Rosas, cuando Jorge Massin trataba de abrir su local y habría sido sorprendido por una persona que intentó robarle y, al resistirse, le efectuó un disparo en la nuca.

El cuerpo de Massin fue descubierto por un cliente, que lo encontró sangrando tendido en el suelo del local, y de inmediato alertó a la seccional próxima.

Fuentes de la investigación señalaron que se trata de establecer si el comerciante se trabó en lucha con el delincuente y si éste actuó sólo, porque en el lugar se encontró otro disparo en el techo. En la zona están instaladas dos cámaras de seguridad que podrían haber registrado el crimen, o servir de ayuda en la investigación.

El segundo de los hechos se registró a las 11 en la calle Soldado Aguirre al 2300, en la vecina ciudad de Villa Gobernador Gálvez, en donde fue ultimado un hombre de 42 años que había salido de la cárcel de Coronda, tras purgar una pena por abuso sexual. Según fuentes policiales, un sujeto le efectuó a Miguel Angel Gauna, de 42 años, dos disparos en los miembros superiores y lo remató con otro en la cabeza, tras lo cual escapó.

Los voceros señalaron que en el lugar se encontraron numerosas vainas calibre 9 milímetros y el caso quedó en manos de la Brigada de Homicidios, con intervención del juez de Instrucción Penal en feria, Luis María Caterina.

El tercero de los hechos violentos tuvo lugar a las 15 en el cruce de Playa Chica y Villa del Mar, en el barrio denominado Puente Gallego, en el zona suroeste de Rosario, donde se produjo un enfrentamiento entre dos sujetos que, al parecer, tenían "asuntos pendientes" por un viejo homicidio, se informó.

Según los voceros, Gastón Veloso, de 22 años, y Domingo Ernesto "Chacho" Flores, de 35, estaban en plena calle cuando fueron sorprendidos por un joven de 18, quien está identificado y se encuentra prófugo.

Al parecer, el joven disparó contra Veloso con una pistola 9 milímetros y Veloso respondió con un arma calibre 22, lo cual generó un enfrentamiento. Otra versión policial, sin embargo, señaló que Veloso no se encontraba armado cuando estaba acompañado por su amigo Flores y fue sorprendido por otro sujeto que los atacó a balazos con un arma de bajo calibre. Lo concreto es que en la balacera ‘Chacho‘ Flores cayó muerto y el propio Veloso recibió un tiro en el torso y fue internado en Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, de Rosario.

Anteayer se cometieron otros tres homicidios con armas de fuego. Una de las víctimas fue identificada como Alejandro Costolla, de 33 años, que fue encontrado baleado en Necochea y Ameghino, en el barrio La Tablada. Este hombre se había fugado de la Alcaidía de la Jefatura de la Policía el 2 de noviembre pasado. El otro hecho se produjo en Pasaje Rivera al 1100, donde murió Gastón Díaz, de 20 años, de un disparo en el pecho. Matías Escobar, de 24, fue asesinado en Viedma al 300, durante un intento de robo en el que también fue herido otro joven que lo acompañaba.