Recuperó la libertad el conductor de Uber moto que protagonizó el fatal choque del 13 de julio en la ciudad de Santa Fe, en el que falleció su acompañante.
La defensa había acordado la prisión preventiva mientras el hombre permanecía internado, producto de las lesiones. Ahora, acordó la libertad bajo alternativas.

Recuperó la libertad el conductor de Uber moto que protagonizó el fatal choque del 13 de julio en la ciudad de Santa Fe, en el que falleció su acompañante.
Se trata de Pablo Ismael Budiño, imputado como coautor del “homicidio culposo agravado” de Joaquín Serra, el joven de 22 años que lo había contratado a través de la aplicación de Uber para que lo trasladara.
El juez Pablo Spekuljak dispuso la libertad bajo medidas alternativas a la prisión preventiva, luego de que así lo acordara la fiscal Rosana Marcolín y el defensor Martín Risso Patrón. La resolución se efectuó el viernes pasado.
En la causa hay otro imputado, Cesar Miguel Ojeda, quien conducía la camioneta que impactó contra la moto de Budiño en la intersección de Lamadrid y Castelli la siesta del segundo domingo de julio.
El fatal suceso ocurrió el domingo 13 de julio a las 13.30 cuando Joaquín Ignacio Serra se trasladaba en la motocicleta de Budiño y colisionaron con la camioneta conducida por Ojeda.
La camioneta marca Chevrolet modelo LUV circulaba por calle Castelli en dirección oeste-este, mientras que la motocicleta marca Motomel modelo Skua 150cc. circulaba por calle Lamadrid en dirección norte-sur y llevaba como acompañante a la víctima.
Los vehículos colisionaron en la intersección, y como resultado del siniestro Serra falleció en el lugar.
Budiño sufrió fractura de fémur derecho y omóplato izquierdo, entre otros traumatismos en distintas partes del cuerpo, como el cráneo. Permaneció varios días internado.
Oportunamente, desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) hicieron hincapié en que este caso destaca del resto de los accidentes de tránsito, debido a que ambos conductores dieron positivo en el narcotest. Ambos habían consumido cocaína, y Budiño además tenía alcohol en sangre.
El hecho fue calificado como un “homicidio culposo”. Se trata de un homicidio sin intención, que se debe a imprudencias. Para esta figura, la ley prevé una pena mínima de 3 años de prisión, y esto hace que el delito pueda ser excarcelable.
Respecto a las distintas versiones surgidas luego del siniestro, acerca del uso del casco, la fiscalía confirmó que la víctima fatal no lo estaba usando al momento del impacto. Sin embargo, también aclaró que su utilización no habría tenido injerencia en el trágico resultado, ya que la autopsia confirmó que Serra falleció a causa de un traumatismo cervical grave.
El proceso judicial continuará con ambos imputados en libertad.




