Desde hace varios días, familias de Santo Tomé atraviesan serias dificultades para acceder al agua potable debido a una marcada baja en la presión del servicio, una situación que no es nueva y que se vuelve crítica en medio de las altas temperaturas. Según aseguran los vecinos, en muchos hogares, el suministro es prácticamente inexistente en gran parte del día, lo que genera malestar y reclamos, a pesar de que hay una obra en marcha.
La presidenta de la Vecinal Luján, Danisa Robledo, detalló que el barrio cuenta con dos tanques de agua que abastecen a sectores distintos y que hoy presentan fallas simultáneas. "Villa Luján está delimitada por calles Alberdi, Richieri, Castelli y Malvinas Argentinas, y se abastece de dos tanques: uno ubicado en Adelina Centro-Oeste, para el sector oeste de Villa Luján y otro, el Zazpe, que provee al sector este", explicó.
En el sector Oeste, el inconveniente se agravó la semana pasada porque "se rompió una bomba y no había otra de back up. Recién ayer (por este lunes) fueron a buscar una a Rosario y la colocaron al mediodía de este martes", precisó Robledo.
Del lado Este, la situación es estructural y lleva más tiempo sin solución. "El tanque del Zazpe tiene una fisura desde hace un año. Si se llena más de la cuenta, rebalsa y se inunda toda la zona", advirtió. Según recordó, en una reunión realizada en octubre las autoridades municipales se comprometieron a realizar un bypass hacia la Cisterna Sur, algo que hasta el momento no ocurrió", remarcó.
Como consecuencia, el servicio es prácticamente inexistente en amplios sectores del barrio. "De ambos lados de Villa Luján estamos con inconvenientes con el servicio. Estas últimas semanas, prácticamente nada. Puede haber un poco a la mañana, pero a las 10 ya nos quedamos sin agua, y hay vecinos que directamente no tienen una gota", señaló.
Este martes se realizó una reunión entre vecinales, concejales y funcionarios municipales.Petitorios y reuniones
Ante este escenario, la vecinal presentó reclamos formales ante distintos organismos. "Presentamos notas al Ejecutivo, a los concejales, al gobernador, al ministro de Obras Públicas, a la Defensoría del Pueblo y al senador", enumeró Robledo. Según indicó, desde el Municipio se argumenta que la obra no avanza porque la Provincia solo financió una primera etapa. "El intendente dijo que la documentación estaba perfecta, pero que faltan la segunda y la tercera etapa, que nunca llegaron", explicó.
Robledo también describió que "los vecinos están molestos y angustiados. Hay gente grande, personas con discapacidad y vecinos que no tienen cómo comunicarse y la están pasando muy mal sin una gota de agua", afirmó. En su caso personal, relató: "Hoy me levanté a las 5.30 y no tenía agua. Tengo una perforación, pero sabemos que esa agua no es buena; incluso tengo un proceso alérgico por usarla".
Finalmente, reclamó mayor presencia y comunicación oficial. "Los vecinos quieren que el propio intendente salga a hablar, que informe con anticipación. En nuestra zona nunca sabemos lo que pasa. Siempre nos enteramos cuando ya no sale una gota de agua y eso cansa y desgasta".
Hernán Palmich, secretario de Obras Públicas de Santo Tomé.La obra en marcha
Por su parte, el secretario de Obras Públicas de Santo Tomé, Hernán Palmich, confirmó a El Litoral que en la reunión de este martes, "con los concejales de todos los partidos y con las representantes vecinales del cuadrante que está sufriendo baja presión, tuvimos la oportunidad de explayarnos sobre el alcance de la obra y el estado de avance". Añadió que "el cuadrante afectado es el comprendido entre las avenidas Richieri, Luján, Ruta 19, Ejército Argentino y la autopista".
Palmich precisó que el problema no se presenta de manera uniforme en todos los sectores. "Tienen baja presión, entonces hay zonas de los barrios que manifiestan problemas de suministro y hay otros sectores que tienen servicio normal. Es una cuestión de redes ampliadas por sobre sus reales capacidades de diseño, producto de muchos años de ampliaciones sin planificación", sostuvo.
En ese marco, indicó que desde el inicio de la gestión se viene trabajando en un proyecto de ingeniería para reforzar el sistema. "Para eso venimos gestando una obra de aporte a la red, cuya construcción ya se inició, por etapas, y a través de convenios con la provincia", detalló.
Primera fase
Según el funcionario, la intención es cerrar la primera fase de los trabajos en el corto plazo. "La propuesta es poder estar generando impulsión y una mejoría en el servicio a partir de la segunda semana de enero", aseguró.
La obra consiste "en una adaptación de los tanques cisterna y el tratamiento de agua para la inyección directa a la red mediante equipos aeroneumáticos", dijo.
"Entendemos que la obra está calculada completa para la mejoría del sector, entonces poder habilitar en etapas los equipos y las instalaciones con sus respectivas pruebas de funcionamiento, es lo que va a dar una mejoría paulatina al servicio hasta que la obra esté activa al 100%. Nos resta el compromiso asumido por Provincia, de que llegarían dos nuevos tanques cisterna y complemento de instalaciones eléctricas", argumentó.
Mientras tanto, el Municipio implementó un esquema de emergencia. "Como la baja presión es irregular, tenemos activo un sistema de contingencia con cisternas distribuidas en distintos puntos de los barrios, además de líneas de comunicación con participación ciudadana, Protección Civil y el 0800 del municipio, a través de las cuales se brinda asistencia puntual a quien lo demande", explicó Palmich.