Dani Alves reapareció como predicador evangélico: “Hay que tener fe, yo soy la prueba de eso”
El exfutbolista brasileño fue filmado dando un sermón en una iglesia de Girona, tras haber sido absuelto por la Justicia. Se define como “discípulo de Cristo” y se volcó por completo a la fe, la familia y la vida espiritual.
Dani Alves reapareció como predicador evangélico: “Hay que tener fe, yo soy la prueba de eso”
Dani Alves atraviesa una etapa completamente distinta en su vida. A sus 42 años, el exlateral de la selección de Brasil reapareció en un video viral ejerciendo como predicador evangélico, lejos del fútbol profesional y con un nuevo mensaje: “Hay que tener fe, hermanos míos. Yo soy la prueba de eso”.
Las imágenes lo muestran recorriendo los pasillos de una iglesia en Girona, rodeado de fieles sentados, con un tono enérgico y decidido. “El Dios de allá es el mismo Dios de aquí”, exclama, en un testimonio grabado durante una de sus apariciones públicas más comentadas desde su liberación.
Una absolución que redefinió su vida
Alves había sido condenado por abuso sexual en Barcelona, en un proceso judicial que se inició en 2022 y lo llevó a pasar tiempo en la cárcel Brians 2. Sin embargo, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña anuló esa condena tras detectar irregularidades en las pruebas.
Desde entonces, el exjugador dio un giro total: se alejó del deporte, se reconcilió con su esposa Joana Sanz y dedicó su vida a la fe. Según sus propias palabras, hizo un “pacto con Dios” para dejar atrás la oscuridad y comenzar una nueva etapa.
Del Camp Nou al Congreso de Jóvenes Evangélicos
Uno de sus primeros actos públicos fue su participación en el Congreso de Jóvenes de la Iglesia Elim de Girona, a fines de octubre. Allí, con las manos en alto y el micrófono en mano, Alves compartió su testimonio espiritual ante decenas de creyentes.
“En medio de la tempestad, siempre hay un mensajero de Dios. Y ese mensajero me recogió en el peor momento”, dijo ante los asistentes. También reveló su oración más íntima: “Te voy a servir, pero cuida de mi casa, de los corazones de quienes no me abandonaron”.
Fe, redes y un nuevo rol social
El exjugador del FC Barcelona mantiene 35 millones de seguidores en Instagram, pero sus publicaciones ya no giran en torno al fútbol: ahora comparte versículos bíblicos, reflexiones sobre el perdón y mensajes motivacionales.
Se presenta como “discípulo de Cristo Jesús”, reafirmando su nuevo propósito de vida. En redes sociales, miles de usuarios reaccionaron con sorpresa ante su nueva imagen: el futbolista carismático, polémico y talentoso, ahora convertido en referente religioso.