Caras Extrañas es el nuevo proyecto de Mauricio “Junior” Lescano, ex cantante y líder de La 25. El grupo nació entre julio y agosto del 2021. La idea surgió cuando se habilitan los conciertos post pandemia; y Junior con sus amigos decidieron volver a los escenarios. Casi todas las canciones de Caras Extrañas están compuestas por Junior, al igual que en La 25, por eso, el repertorio de Caras Extrañas incluye canciones de su banda anterior.
A Junior (voz y guitarra) lo acompañan músicos de la era de La 25, como Heber Vicente en batería, Darío “Rodia” Bruschi en guitarra acústica y Juan “el Niño” Ildarraz en armónicas, sumando a Gastón Picazo en teclados, Ariel “Arito” Rodríguez en guitarra, Ernesto “Garfield” Candenas en bajo, y Enzo en saxo.
Caras Extrañas se presentará en Tribus Club de Arte (República de Siria 3572) el viernes 12 de mayo a las 21. Las entradas están a la venta en la boletería de la sala (de miércoles a domingo, de 18 a 0) y a través del sistema Ticketway y sus puntos de venta (online y físicos).
Para conocer más sobre la propuesta, El Litoral conversó con Arito Rodríguez, un artista de larga trayectoria que pone su experiencia en este proyecto en expansión.
Nuevas caras
-Están volviendo para Santa Fe y Rosario, que fueron de los primeros lugares donde se habían presentado como Caras Extrañas en octubre de 2021. ¿Se sienten consolidados como banda después de todo este tiempo?
-Creo que sí. Después del tiempo natural de asentamiento de lo que sería un nuevo proyecto, más nuevas personas; dándole espacio a que funcione y a ver cómo reacciona la nueva propuesta; pasando ese tiempo (que ya pasó) la banda está súper asentada y amalgamada. O sea que sí, ya podríamos decir que Caras Extrañas hace rato que ya está con identidad propia.
Quizás, cuando vengan a los shows, aún van a encontrar que hay temas de La 25, porque es la historia de Júnior. Pero de manera natural, y paso a paso, estamos creando la nueva música de Caras Extrañas y de Junior; lo cual a veces lleva un poco de tiempo para trabajarlo: para trabajar todo todas las ideas y pensar bien la dirección musical que tiene la banda. Pero vamos bien, el ritmo que estamos llevando está bueno.
-¿Cómo fue el momento cuando Junior te convocó a sumarte a este barco?
-Me llegaron mensajes por medio de Álvaro Villagra, este famoso técnico de grabación y productor, uno de los mejores (si no el mejor); me llamó para comentarme que Junior estaba convocando músicos para armar un nuevo proyecto, en ese momento era Junior 25, “Junior y amigos”. Yo estaba buscando también insertarme en una banda que estuviera en actividad, que sea grande.
Se dio ahí todo con un poco de causalidad de todas las cosas, de las dos partes. Y por suerte funcionó: porque nos llevamos bien, musicalmente y también humanamente, con él y con el resto del equipo. Entonces fue una buena noticia: llegó en un buen momento, y acá estamos para dar pelea.
-Estabas tocando con un proyecto llamado Arito Rock, que era un trío.
-Así es, y va a ser, porque ese es mi proyecto personal. Es un trío, como vos bien dijiste; tiene seis años, y estamos también justo en este momento (como con Caras) creando temas. Para mí este va a ser un gran año de producción musical: con lo que está saliendo con Caras, más lo que está por salir con este proyecto; también estoy con el proyecto de Michel Peyronel, que es Humanoides Disidentes, con el que también hemos grabado, y la idea es seguir. No me puedo quejar de mi futuro ni de mi presente, y tampoco de mi pasado.
Canciones pulidas
-Lo nombrabas a Álvaro Villagra; con él grabaron cinco temas, el primer sencillo había sido “Ya no”, con Pato Fontanet; también estaba “Pruébalo” que quizá el más popular. Después salieron un par más, como “Leyendas urbanas” y “El dije”.
-En “El dije” tuve la suerte de poder componer gran parte del tema, de la idea; después fue trabajar en conjunto con los compañeros, y también un poco llevar la letra a la poética de Junior; y en la parte musical un poco también.
Desde la “base demo” que presenté se llegó al resultado final que es “El dije”. Estoy muy contento con lo que quedó, muy bueno.
-Los temas están saliendo como singles, de a uno.
-Se dio un poco así porque no es que tenemos (ni teníamos) preparado un disco completo como para salir; sino que a medida que la banda se iba a conformando, y se iba terminando de consolidar con todos los integrantes que hoy estamos, se iba también creando la música. También tiene mucho que ver el carácter de cada músico, que ayuda a perfilar para dónde van el sonido y las ideas.
Ahora que la banda está bien plantada el proceso ha comenzado. Comenzó desde el primer tema que empezamos a grabar, pero como te decía: no teníamos 20 ideas como para decir “bueno, grabamos todos juntos”. Por eso fueron saliendo así, a manera de singles.
Que también es algo que se usa mucho hoy en día; y en realidad si lo querés buscar en una manera estratégica sería como que la gente escuche el tema, lo conozca, y después de un tiempo darle otro. En vez de darle 20, 10 o 15, que quizás muchos lo dejan relegado: se encariñan más con los hits o los cortes de difusión, y algunos temas quedan en un segundo plano. Esto de trabajar de a uno también te hace pensar en que ninguno va a ir en segundo lugar, son todos temas importantes en la manera en que se lo trabaja. No es que decís “bueno, vamos a sacar tres hits, o cuatro, y después todo lo demás es relleno”; no, sino que todos los temas tienen una identidad propia, más allá de formar parte de un disco: esa también es un poco la mentalidad.
-¿Cómo responde la gente a esta música nueva en los shows?
-Responde perfecto, súper: creo que ya se conocen todas las letras, tienen sus temas preferidos para cada uno, los recibieron muy bien. “Ya no” tiene mucha fuerza en vivo, y lo estamos usando mucho para cerrar los shows: es uno de los picos más altos. Después “Viejos hábitos” es una semi balada, una letra bastante fuerte; sirve para matizar la energía en la mitad del show. Y la gente lo recibe bien: se deja llevar por el viaje de Caras Extrañas; cómo los conducimos (simpáticamente, no de manera autoritaria) por este viaje musical de rock and roll, de canciones, y de muchas letras que hacen emocionar.
Es todo un viaje, más que nada para los viejos fans de La 25, de Junior, que con cada letra tienen una historia personal. Las nuevas ayudan a tener nuevas aventuras: ir a ver bandas, conocer gente nueva, diferentes lugares, nuevas experiencias que son acompañadas por la música de Caras Extrañas.
Todos los escenarios
-El año pasado lo cerraron en Ferro, y este año ya hicieron Cosquín Rock en Argentina y en Paraguay. ¿Cómo vivieron esas experiencias?
-Fueron muy buenas experiencias, poniendo a prueba el equipo, la banda, en la ruta; transitando juntos todos los caminos y matando todas las horas. Porque cuando estás trabajando con la música de verdad, a tiempo completo, a veces es menos lo que estás tocando el instrumento, y es mucho más lo que estás preparando el evento: incluye las horas de viaje, las pruebas de sonido; hasta la llegada del show, que dura cerca de dos horas. Es todo un preparativo y un esperar; y después del show es disfrutar de la batalla ganada; o empatada, pero nunca perdida.
Esos eventos grandes como los Cosquín siempre incentivan a querer hacer las cosas mejor: para la gente y para el marco del evento. Te ayuda a progresar y a ir poniendo la vara más alta y un horizonte más brillante.
-Es como “de acá para arriba”.
-Exacto. Es como decir: “Bueno, vamos” Aparte a veces tocamos en bares y lugares más chicos: también es parte del camino, está bueno disfrutar de los diferentes espacios. En un evento festivalero la gente está un poco más lejos, y capaz no llegás a veces a sentir la energía tan de cerca como en un bar pequeño.
A mí me gusta más la experiencia de los bares chicos, pero lo otro tiene la magia de que es como una obra teatral, para el que está viendo la banda desde afuera. Lo digo también desde mi lado de espectador y de fan de bandas: cuando voy a ver una banda en un estadio es otra presentación. Es como que tengas una revista, que es el formato gráfico de algo, y tenés un libro de tapa dura, ya con hojas de otro nivel. Es la presentación lo que cambia; si bien el contenido es el mismo, va a salir la misma calidad, pero la presentación es diferente
Las dos son buenas, pero en mi caso personal me gusta tener la gente al lado, abajo, bien cerca; y que escuche el equipo casi crudo, sin pasar por la consola.
Seguir andando
-¿Qué se viene para lo que queda de 2023?
-Estamos ensayando y preparando un tema nuevo, así que el proceso continúa. Y vamos a seguir hasta completar dos temas más, como para ahí sí, decir “tenemos un disco completo”. Que cierra el primer el primer ciclo de Caras Extrañas.
Después llegar a más personas, que la presentación sea cada vez mejor. No abandonar esos lugares pequeños, que es donde realmente uno nació, donde nacen las bandas y donde hay una ceremonia especial con la gente: de Santa Fe, de Córdoba, de todas las provincias donde vamos haciendo pequeñas bases. Y a la vez a ver llegar a lugares más grandes: más festivales, más lugares históricos donde uno siempre quiso tocar.
Y por suerte mantenerse en actividad, en este país donde es tan difícil hacer lo que a uno le gusta. Así que por ese lado estamos bendecidos; podría ser mejor, pero mejor ya sería demasiado: estamos bien.