El paso del huracán Imelda por la costa este de Estados Unidos dejó una estela de destrucción en Carolina del Norte.
La fuerza de las mareas y los vientos provocaron el derrumbe de viviendas en la costa este de EE. UU.

El paso del huracán Imelda por la costa este de Estados Unidos dejó una estela de destrucción en Carolina del Norte.
En un lapso de tres días, ocho viviendas construidas sobre pilotes en la playa colapsaron hacia el mar debido a la fuerza de las mareas y los vientos. Las autoridades locales informaron que no se registraron víctimas fatales, aunque los daños materiales fueron significativos.
Imelda, que tocó tierra en la región el pasado viernes, sorprendió a meteorólogos y residentes por su intensidad y rapidez. A pesar de no haber alcanzado la categoría de huracán mayor, el fenómeno generó mareas excepcionalmente altas y vientos sostenidos que erosionaron las bases de las viviendas costeras.
El colapso de las estructuras fue casi inmediato, dejando escombros esparcidos por la playa.
Además de la pérdida de viviendas, el paso de Imelda causó inundaciones en áreas cercanas y daños en infraestructuras viales.
Las autoridades locales emitieron alertas de evacuación preventiva en zonas de alto riesgo, aunque no se reportaron heridos graves. Equipos de rescate y asistencia humanitaria fueron desplegados para brindar apoyo a los afectados y evaluar los daños.




