La manicura almendrada se impone como favorita del verano
Inspirada en la estética del lujo discreto, esta forma de uñas combina elegancia, versatilidad y naturalidad. Los tonos suaves y los diseños minimalistas se consolidan como la elección ideal.
La manicura almendrada se impone como favorita del verano
Las uñas almendradas se posicionan como el diseño estrella de la nueva temporada, marcando el pulso de la moda en manicura con su equilibrio entre elegancia y naturalidad. Inspiradas en la forma del fruto que les da nombre, combinan la sofisticación del lujo silencioso con la versatilidad que las convierte en aliadas tanto para looks clásicos como modernos.
Esta tendencia, que resurge con fuerza en las pasarelas y redes sociales, apuesta por una estética cuidada pero sin excesos. En tiempos donde prima la discreción y el buen gusto, las uñas almendradas se presentan como una declaración de estilo que prioriza la armonía de las manos y la sutilidad de los detalles.
Una forma que favorece
La principal ventaja de las uñas almendradas es su capacidad de estilizar los dedos y generar una sensación de alargamiento visual, lo que las convierte en una opción ideal para casi todas las manos. Su silueta ovalada, con puntas ligeramente afinadas, ofrece un balance perfecto entre la fuerza de las uñas puntiagudas y la suavidad de las redondeadas.
Uñas almendradas en tonos nude, símbolo de elegancia natural.
Además, esta forma resulta muy práctica y cómoda para la vida cotidiana, a diferencia de otros estilos más extremos. Puede adaptarse a distintos largos sin perder su encanto, lo que la vuelve una elección acertada tanto para quienes prefieren una manicura discreta como para las que disfrutan de diseños más llamativos.
La clave del éxito radica en su versatilidad: se adapta a múltiples estilos, desde el minimalismo más pulido hasta las versiones decoradas con detalles metálicos o toques de color pastel.
Colores y diseños que acompañan
El espíritu del lujo silencioso, que sigue marcando la moda global, también se traslada al universo beauty. Las uñas almendradas adoptan tonos suaves, acabados naturales y brillos discretos. Los esmaltes en nude, beige, durazno o rosa empolvado encabezan las preferencias, seguidos por los tonos perlados y los acabados lechosos que aportan un toque de frescura.
Manicura clásica con un giro moderno para el verano.
Sin embargo, la temporada primavera-verano 2025/2026 no se limita a lo neutro. También hay espacio para la creatividad y los contrastes. Entre las opciones más elegidas se destacan:
Efecto chrome: una capa metálica en plata, oro o rosado que aporta modernidad sin perder elegancia.
Manicura francesa invertida: una reinvención del clásico, con líneas finas y colores pastel.
Diseños florales o geométricos: detalles sutiles que añaden un toque artístico.
Esmaltado translúcido: ideal para quienes buscan una apariencia natural pero cuidada.
Aplicaciones de brillo puntual: pequeñas gemas o perlas que refuerzan el espíritu delicado de la tendencia.
El lujo silencioso llega a las manos
La moda actual se inclina hacia la sutileza, y las uñas no son la excepción. La estética del lujo silencioso se traduce en una manicura pulida, con tonos sobrios y formas equilibradas que hablan de cuidado personal y estilo sin necesidad de ostentación.
Las uñas almendradas encarnan a la perfección este concepto: son femeninas, refinadas y atemporales. Funcionan igual de bien en un entorno laboral que en un evento social, y logran transmitir una imagen de elegancia sin esfuerzo.
Esta temporada, las tendencias apuntan a una belleza más consciente, que valora la armonía y el bienestar tanto como la apariencia. Las manos, protagonistas silenciosas de la expresión personal, se visten con colores suaves y formas naturales que invitan a redescubrir la delicadeza en cada gesto.