Ayer, en las primeras horas de la tarde, sorprendió la actitud de Hermes Binner que, vía mail, invitó a Rubén Giustiniani al acto de Bonfatti. La cosa no quedó allí, porque el mandatario le reclamó también ser invitado al acto que el senador nacional presidirá el próximo sábado, para lanzar su precandidatura a gobernador.
Pero Giustiniani no fue al acto, y según confesó el propio Binner, ni siquiera le contestó el mail. En diálogo con El Litoral, el gobernador negó que su actitud haya sido una provocación.
—¿Por qué invitó a Giustiniani?
— Para el diálogo. Creo que es importante que dialoguemos.
—¿Ud. creía que Giustiniani podía venir?
— No, pero quería que supiese que estaba invitado. Y si me invitan a mí, yo vengo el sábado.
—¿No cree que esto puede ser considerado como una provocación para el otro sector?
— No. El diálogo nunca es provocación. Provocación es mandar a alguien para que corten el tránsito, para que no dejen entrar.
—¿Le gustaría estar el sábado acompañando a Giustiniani?
—Sí, por supuesto.


































