El presidente Javier Milei participa este sábado de la cumbre de mandatarios del Mercosur en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, tras formar parte de la tradicional foto de familia con las Cataratas como escenario.
El presidente argentino participó de la foto de familia y mantuvo un breve y distante saludo con su par de Brasil. La cumbre está atravesada por el nuevo aplazamiento del acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea.

El presidente Javier Milei participa este sábado de la cumbre de mandatarios del Mercosur en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, tras formar parte de la tradicional foto de familia con las Cataratas como escenario.
El jefe de Estado argentino asiste al encuentro con el objetivo central de insistir en una mayor apertura comercial del bloque. La jornada está atravesada por la búsqueda de una estrategia común frente al nuevo aplazamiento del acuerdo de libre comercio con la Unión Europea.
El tratado, que se esperaba rubricar en esta instancia, fue postergado nuevamente por decisión del bloque europeo hasta el mes de enero. La demora responde a la resistencia de sectores agrícolas de Francia e Italia, que cuestionan aspectos del entendimiento.
Durante el inicio de la actividad oficial se produjo un saludo frío y protocolar entre Milei y el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. El breve intercambio se dio ante la presencia del canciller argentino, Pablo Quirno.
El gesto reflejó el trasfondo de tensiones diplomáticas entre ambos mandatarios, atravesadas por diferencias ideológicas y declaraciones cruzadas en los últimos meses. Aun así, ambos coincidieron en el escenario regional para avanzar en la agenda común del bloque.
En este contexto, la cumbre busca evitar un nuevo estancamiento del Mercosur frente a un acuerdo que lleva más de dos décadas de negociaciones y que vuelve a quedar sujeto a decisiones externas.
En medio de las deliberaciones, el canciller de Paraguay, Rubén Ramírez, fijó la posición de los países miembros frente a la Unión Europea. “Estamos dispuestos a avanzar, entendiendo que Europa tiene sus plazos para cumplir las cuestiones institucionales internas, pero los plazos no son infinitos”, afirmó.
Los presidentes de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay intentan consensuar una postura firme que permita sostener la negociación sin resignar intereses estratégicos del bloque regional.
Para Milei, la cumbre representa una nueva oportunidad de insistir con la necesidad de flexibilizar las reglas internas del Mercosur y habilitar acuerdos bilaterales que amplíen el comercio exterior argentino.




