El último lunes ante el gabinete ampliado y ante legisladores, el gobernador Maximiliano Pullaro planteó los objetivos para el segundo tiempo. Con El Litoral repasó algunos ejes pero también planteó otros desafíos.
El gobernador definió los ejes estratégicos para los dos años de mandato que le restan. Los números de la negociación con Nación por el déficit de la Caja de Jubilaciones. Llamó a no bajar los brazos por la caída de indicadores de inseguridad.

El último lunes ante el gabinete ampliado y ante legisladores, el gobernador Maximiliano Pullaro planteó los objetivos para el segundo tiempo. Con El Litoral repasó algunos ejes pero también planteó otros desafíos.
- Ya pasó la primera mitad de su mandato y ahora dice que hay que jugar el segundo tiempo. ¿Qué puede esperar de él el ciudadano santafesino?
- Cuando llegamos al gobierno teníamos temas urgentes a resolver. Si no lo hacíamos, era muy difícil ponernos objetivos ambiciosos para llevar adelante transformaciones que le acerquen el estado al ciudadano y le faciliten la vida.
Ahora vamos por la digitalización, por la cercanía para que la gente no tenga que hacer colas para un trámite, que todo lo pueda resolver desde su teléfono celular. Vamos por la inteligencia artificial aplicada al sistema educativo; vamos también por la tecnología aplicada al sistema de salud pública. También en la justicia. Esto hubiese sido imposible si seguíamos teniendo índices de violencia y delito como 2022 y 2023. Hubiese sido imposible poder planificarlo o poder plantearlo si la infraestructura vial estaba con las rutas detonadas.
Hubiese sido completamente imposible pensarlo con menos de 150 días de clases. Agrego lo financiero. Me tocó asumir una provincia con déficit fiscal y con deuda flotante por diferentes razones. Por diferentes razones la economía no estaba bien.
- En los dos años que le restan de mandato, ¿la provincia va a tener la independencia financiera más allá de lo que pase a nivel nacional?
- Cuando me tocó comenzar la gestión decían que en marzo o abril no íbamos a poder pagar los sueldos. Sin embargo, llegamos a junio con superávit fiscal, porque hicimos un achique y un ajuste muy grande del Estado. Hubo baja en un 40% del costo de la obra pública; con la eficiencia del estado que nos trajo ahorros de $172 000 millones en dos años en la compra de medicamentos o con la baja del 40% en el costo de los ministerios en términos reales.
Tuvimos una caída de recursos de 11,8% en términos reales comparando el 2025 con el 2023. Es decir, $1 billón 300 000 millones menos. Sin embargo, la provincia está muy sólida financieramente.
El 23 pagamos el aguinaldo y los días planificados para pagar los salarios de los empleados públicos de enero, que es el mes más duro. Esto es porque la provincia tiene una administración muy pero muy ordenada, austera y honesta.
- Santa Fe tiene un millón de habitantes de entre 16 y 35 años que son carne de cañón de los algoritmos comerciales. Es un grupo decisivo en elecciones pero que menos comprometido está con los partidos políticos y con la cosa pública. ¿Cómo se confronta desde la política este fenómeno?
- Lo que le proponemos a la sociedad son programas de gobierno: se planifica, se ejecuta una política pública y se pueda medir. Los jóvenes son los que más ven eso. Dos años atrás, los jóvenes no podían ir a un recital, a un festival, a un encuentro deportivo porque no se hacían en la provincia. Muchos no podían salir desde sus casas y si salían, sus padres estaban con el corazón en la boca. Hoy, la provincia recobró una vida distinta y los jóvenes disfrutan la vida de la provincia, salen de noche, van a espacios públicos, a playas y viven todos los días. Le vamos a hablar con gestión.
No subestimamos a los jóvenes que a través de algoritmos se van a dejar llevar a lugares diferentes. Ellos saben muy bien si están mejor o peor. Pero también le hablamos a los jóvenes. Hoy, el presidente de la Unión Cívica Radical es un joven de 36 años que, antes, fue reelecto como intendente con el 83% de los votos en una de las ciudades más importantes que tiene Santa Fe (por Venado Tuerto). Tenemos una cercanía muy importante con los jóvenes y entendemos que van a tener una participación muy grande en la vida institucional de la provincia de Santa Fe.
-Esos mismos jóvenes engrosan las estadísticas en materia laboral, pero con trabajo de baja calidad ¿cómo ve esa dinámica?
- Los jóvenes hoy no están arraigados a los valores que estábamos tiempo atrás, pero van a ser el motor de la nueva Argentina y Santa Fe se tiene que preparar para ser el instrumento de esa Argentina nueva que la lleve al crecimiento económico y al cambio definitivo.
Hay muchas cosas que durante muchos años no estuvieron bien en nuestro país y tienen que cambiar. La provincia de Santa Fe debe ser protagonista de esos cambios porque tiene todas las condiciones para ser la locomotora que empuje el cambio en la República Argentina.
En la provincia veo a los jóvenes como protagonistas de este cambio, por eso apostamos al fortalecimiento del sistema educativo, pero con herramientas tecnológicas, con inteligencia artificial. Apostamos a la ciencia, a la tecnología, al fortalecimiento de la educación, a darle las herramientas para que se puedan desarrollar.
- ¿Cómo está la relación con el gobierno nacional? Tuvo contactos pero no foto con Diego Santilli. ¿El presupuesto votado contempla ninguno de los reclamos históricos viene siendo Santa Fe?
- Ni Santa Fe y te diría ni de ninguna provincia. Nosotros acompañamos políticas del gobierno nacional en las que estamos de acuerdo, que tienen que ver con sostener un equilibrio; no se puede gastar más de lo que entra en una economía ya sea ni familiar, municipal, provincial, nacional. Es una regla que se quebró permanentemente en el estado nacional. Pero hay cosas que no podemos descuidar. Nuestro lugar es la defensa de la provincia de Santa Fe; defensa acérrima de esta provincia.
No es lo mismo una provincia que tiene las cuentas ordenadas como Santa Fe, que no le debe nada a nadie y que los compromisos los puede asumir con su propia caja, que una provincia que tiene que rollear su deuda permanentemente, ir a los mercados internacionales y necesita del gobierno nacional para que le adelante o para que le habilite un crédito para poder pagar.
Santa Fe está sólida y va a estar cada vez más sólida. Santa Fe está parada en un lugar distinto y lo tienen que saber los santafesinos. Estamos parados en un lugar donde nuestra economía es sólida y nuestras finanzas son sólidas.
- En el tema previsional, la Nación no cumple los acuerdos firmados oportunamente. ¿Usted espera una decisión de la Corte o de la política?
Estoy hablando, diría, semanalmente con Diego Santili, del stock y también del flujo de la deuda. El stock tiene que ver cuánto le debe Nación a la provincia de Santa Fe, que es mucho. Está entre el billón y dos billones de pesos. Lo dirá la Corte o lo dirán las auditorías, pero son muchos recursos que le debe la Nación a Santa Fe. Después está el flujo que nos tendría que dar mensualmente y que por un artículo del decreto 380 del año 2024, el presidente Milei cortó dineros a las cajas de jubilaciones de las provincias que no las habíamos transferido.
En la discusión por el stock, entendemos que Nación no está en condiciones de pagar. El debate es que nos puedan dar bonos, que podamos canjear en el mercado secundario o como gesto de buena voluntad que nos puedan dar bienes del Estado Nacional, nosotros los tomamos como patrimonio y capital. No hemos llegado a un acuerdo.
- ¿Tienen algo focalizado de inmuebles?
- Acá el edificio del Correo, algunos terrenos donde se puede hacer un desarrollo público privado, nuevos parques o plazas o desarrollos inmobiliarios que le den un valor distinto a la ciudad.
En la ciudad de Rosario está Puerto Norte, los terrenos y edificios de Ejército. La nación tiene muchos terrenos, muchos que pertenecían al ferrocarril, que la provincia los podría articular con municipios y hacer muchas cosas muy lindas. Lo tomaríamos como un gesto de buena voluntad. Tal vez sea 2, el 3% de la deuda, pero sería una mirada de reconocimiento y un intento de resolver la situación.
Sobre el flujo hay una discusión mucho más dura.
- ¿Son hasta 20.000 millones por mes?
-Sí, hoy más. Nación nos ofrece mucho menos. Tal vez algunas provincias lo necesiten y agarren menos como ha pasado. Me ofrecieron $5000 millones por mes en agosto. Entendemos que nos deberían transferir 20 000 millones, entonces la diferencia es mucha. Distinto sería si estaríamos hablando sobre la mitad.
Nación nos reclama el 1,9% para AFIP que firmó el gobernador anterior (por Omar Perotti), que son muchos recursos que nosotros no tenemos por qué cederlos a nación.
- Esto parece más discutible. Tiene principio de ejecución ese acuerdo que firmaron Perotti y (Walter) Agosto con Sergio Massa porque efectivamente Santa Fe recibió y usó los bonos que en estaban en ese mismo acuerdo.
- No coincido con esa apreciación porque eso debió haber salido por ley y la Legislatura nunca lo avaló. Mientras yo sea gobernador nunca voy a mandar ese mensaje. El gobernador anterior mostró un gesto de buena voluntad, pero era facultad de la Legislatura y no del gobernador.
- Después de las elecciones se rompió Provincias Unidas o los gobernadores siguen en contacto.
- El lunes tuvimos un zoom los seis gobernadores, participó por primera vez Juan Pablo Valdés por Corrientes. Estuvo muy bueno y fijamos la posición para llevar adelante en el Congreso. Nuestra presidenta de bloque, Gisela Scaglia, hizo un gran trabajo el miércoles porque marcó límites al gobierno nacional. Además defendió cosas importantes como la educación pública, el financiamiento de la universidad pública, el financiamiento a la discapacidad.
Esas no son leyes que desequilibran fiscalmente a la nación y ponen en entredicho esto de defender las cuentas fiscales en la Argentina. Son leyes que había aprobado el Congreso y por intermedio de un capítulo en el presupuesto pretendían ser derogadas, no vetadas. Son leyes que expresan la voluntad mayoritaria del Parlamento.
Cuando se gobierna, se sabe que hay un contrapeso de las instituciones democráticas y siempre tiene que respetar lo que dice el Congreso en este caso, y yo lo que dice la Legislatura. No veté ninguna ley que envió la Legislatura y no lo haría porque entiendo que es el juego de la democracia.
- Es cauto con el tema seguridad más allá que han mejorado los indicadores
- Los indicadores del 2024 y el 2025 en términos objetivos fueron los más bajos del siglo. Pero la violencia, fundamentalmente el crimen organizado en Rosario está contenido, no está exterminado o eliminado los actores de la criminalidad organizada, compleja. Hoy tienen un Estado que los tiene contra la pared, que los controla permanentemente y que tiene mucha actividad en la lucha contra la criminalidad organizada desde la inteligencia criminal, análisis criminal, investigación penal junto al Ministerio Público de la Acusación, junto a la investigación federal y desde la política preventiva que aumentó por cinco o por diez la presencia policial en calle.
Me pone muy ansioso sentir que muchos miran esto como una etapa terminada. Ojalá yo pudiese decir, "soy el gobernador que terminó con el crimen organizado en Rosario y con las bandas violentas".
Están contenidas, pero siguen activas sin poder cometer los delitos que cometían hace dos años cuando llegamos a tener en Rosario 290 homicidios en un año. No solo se mataban entre ellos, sino que habían llegado al punto de atacar a la población civil. El caso más resonante puede ser el de Virginia, la bailarina que estaba esperando el colectivo junto a su madre y la matan solo para mandarse un mensaje entre las bandas criminales; o el homicidio del colectivero Roldán el 2 de diciembre del 2023 para dejar una carta a otro pabellón de Piñero.
No voy a los hechos de marzo de 2024 porque sí tenían una reacción clara contra las políticas públicas que llevábamos adelante. Fue muy duro para mí porque los carteles y los mensajes eran amenazas a mi persona y a mi familia como pidiendo una paritaria entre el crimen y el gobierno para que volvamos atrás la políticas de control.
- ¿Cómo harán el año próximo para llegar a los a 190 días de clase que es el objetivo que se ha propuesto el gobierno de Santa Fe?
- Vamos a arrancar las clases en tiempo y forma y las vamos a terminar cuando las tenemos que terminar. Las escuelas hoy tienen las condiciones de infraestructura que no tenían dos años atrás.
Invertimos sobre 2600 edificios en la estructura energética y también de refrigeración, de invierno y de verano. Muchísimas escuelas tienen aires acondicionados o ventiladores, ni hablar para el invierno de la calefacción correspondiente.
Tenemos un sistema educativo con un acompañamiento muy grande de docentes, de maestros y directivos y obviamente asistentes escolares. En el último mes casi 60 000 empleados del sistema educativo cobraron el premio la asistencia perfecta. Nosotros lo tomamos no solo como el premio y como un recurso más que tienen los docentes, sino como una adhesión a la política pública que se llevó adelante.
-Los concursos para cargos directivos terminaron con algunos indicadores de reprobación importantes. ¿Eso es un indicio indirecto de que no están las calidades requeridas en los cuerpos docentes?.
- No sé si es tan así. Que no lo hayan pasado todos, no significa que haya habido una mayoría que no lo haya pasado. En todos los ámbitos cuando uno se pone más exigente también tiene esos resultados. Me pasaba mucho cuando era ministro de seguridad, cuando comenzamos con concursos policiales-.
Vamos a ir mejorando la calidad educativa. Estamos empezando a notar que va a ser una bandera en la provincia de Santa Fe y va a ser lo que legitime los cambios en el sistema educativo. Se destina alrededor del 30% del presupuesto al sistema educativo. Hoy empezamos a notar una mejora en la calidad educativa y lo manifiestan muchos padres fundamentalmente. Eso nos pone muy contentos. Sabemos que 20/25% de la docencia es ruidoso. que critica las políticas públicas en materia educativa, en cambio la inmensa mayoría adhiere y acompaña y sentimos el respaldo.
Y si con alguien estoy agradecido este año es con los maestros, docentes, directivos y asistentes escolares por el esfuerzo que hicieron para mostrar que las cosas en Santa Fe podían cambiar y que podíamos mejorar el rendimiento y la calidad educativa de los chicos y adolescentes.




