Un fuerte e insospechado cruce se dio sobre el tramo final de las exposiciones de la 22° edición del Council of the Americas, donde diversos funcionarios del gobierno nacional compartieron con los más encumbrados empresarios de la argentina.
El ministro de Desregulación reprochó catalogando de "casta" al presidente de la Cámara Argentina de Comercio que haya impuesto un recurso de amparo sobre el decreto que prohíbe imponer cargas económicas a empleadores no afiliados.

Un fuerte e insospechado cruce se dio sobre el tramo final de las exposiciones de la 22° edición del Council of the Americas, donde diversos funcionarios del gobierno nacional compartieron con los más encumbrados empresarios de la argentina.
Los protagonistas fueron el Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, y el presidente de la Cámara de Comercio y Servicios, Natalio Mario Grinman.
El motivo fue un reproche público del ministro por un recurso de amparo interpuesto en la justicia sobre el Decreto 149/2025 que prohíbe imponer en los convenios colectivos de trabajo cargas económicas a empleadores no afiliados.
Sturzenegger repasaba la medida tendiente a prohibir aportes forzosos argumentando que son "una suerte de impuesto privado que no corresponde, ya que la mayoría de las organizaciones funcionan con aportes voluntarios y así debe ser".
En ese sentido, apuntó directamente contra Grinman -presente en el público- por judicializar la medida: No es correcto usar la Justicia para sostener privilegios”, le dijo.
La mención del ministro fue sobre el aporte que el Instituto Argentino de Capacitación para el Comercio (Inacap) cobra sobre el salario inicial de trabajadores amparados por el convenio mercantil.
“Cuando recordaba este tema de usar la justicia para no pagar impuestos, es importante que el resto de las organizaciones no usen la justicia para mantener sus privilegios”, sostuvo.
Y luego le hizo un pedido directo: "Mario te pido por favor, sería un gran gesto bajar esa cautelar”. A lo que el empresario respondió que eso no iba a suceder. "Bueno, la casta se defiende con uñas y dientes”, arremetió Sturzenegger.
“La mayoría de las organizaciones empresariales trabajan con un esquema de aportes voluntarios, la construcción, Adeba (bancos), la Sociedad Rural. No hay que usar la justicia para que tus afiliados hagan un aporte obligatorio que entiendo que nadie quiere pagar”, continuó el funcionario.
“Pensé que me iba a llevar tu acuerdo para darla de baja”, le dedicó luego el ministro. “Bueno, estamos en democracia”, fue la última frase de Grinman antes de dar por finalizado el cruce.
Por su parte, Grinman había realizado una defensa contundente al Gobierno nacional en su discurso del Council of the Americas.
Tras el blindaje que obtuvo el Gobierno del veto presidencial que impedía un gasto extraordinario para las jubilaciones, resaltó que la Cámara "siempre tuvo la misma posición ideológica" y señaló que "nadie puede discutir que los trabajadores de la educación, de la salud, de las fuerzas de seguridad están mal. El tema es de dónde salen los fondos genuinos, sino vamos a jugar a los estancieros", exclamó con contundencia.
Y en ese sentido apuntó contra las provincias: "Está bien que le exijamos al Gobierno nacional, pero también al provincial y a los intendentes. Ayer el Congreso en una larga sesión logró brindar el veto presidencial. Los legisladores son tan brillantes que pueden determinar por ley que todos tenemos que ser felices, eso no existe. Cuando este quid de problemas suceden en el Congreso es muy preocupante, no están pensando en la población que ellos dicen pensar, sino en sus intereses partidarios", señaló con dureza.




