Flor Vigna destrozó su historia con Luciano Castro: “Viví un recontra infierno”
La bailarina rompió el silencio y reveló los aspectos más oscuros de su relación con el actor. En una entrevista sincera, apuntó contra su ex, relató el sufrimiento que vivió durante el noviazgo y cuestionó el rol de Griselda Siciliani, actual pareja de Castro.
Flor Vigna destrozó su historia con Luciano Castro: “Viví un recontra infierno”
Flor Vigna rompió el silencio y habló sin rodeos sobre su relación con Luciano Castro. En una serie de declaraciones recientes, la bailarina y cantante se refirió con dureza a su expareja y reveló aspectos dolorosos de un vínculo que, según sus palabras, la marcó profundamente.
“Viví un recontra infierno”, expresó con contundencia, dejando al descubierto una historia de desgaste emocional, conflictos y decepciones.
La bailarina rompió el silencio y reveló los aspectos más oscuros de su relación con el actor.
Una relación marcada por el dolor
Durante una entrevista con el streamer Martín Cirio y en una nota para el ciclo Puro Show de El Trece, Vigna se mostró abierta y reflexiva, pero también firme al recordar lo vivido junto al actor. Lo describió como una etapa turbulenta en la que experimentó situaciones que afectaron seriamente su bienestar emocional.
“Lo que más me molesta son las zorras… que te hablen re bien y después…”, lanzó, en clara alusión a personas de su entorno que jugaron un doble papel. Las palabras apuntan a una incomodidad vinculada a Griselda Siciliani, actual pareja de Castro, quien incluso la habría invitado a compartir eventos con el actor mientras él aún mantenía su vínculo con Vigna.
Vigna recordó con ironía e impotencia momentos incómodos que vivió durante la relación. Relató cómo se sentía desplazada, actuando como una madrastra forzada mientras se exponía públicamente con Castro.
“Ella me decía ‘venite al teatro con Lucho’... Yo estaba haciendo de madrastra… tenía que estar en la Bresh, no haciendo fideos”, dijo, haciendo referencia a su juventud, sus deseos y la sensación de haber sido empujada a un rol que no le correspondía.
Otro momento que dejó marcada a Vigna fue un llamado que recibió de Castro mientras ella se encontraba en España. Aunque la conversación, según dijo, fue en buenos términos, el gesto reabrió heridas.
“La pasé recontra mal. Está loco, ayúdenlo”, dijo entre risas incómodas, dando a entender que la relación había dejado secuelas emocionales profundas. La sorpresa y el dolor fueron parte de un proceso que aún parece estar en revisión.
Vigna aclaró que no está interesada en ventilar detalles ni alimentar rumores.
Sin victimización, pero con verdad
Lejos de buscar compasión o instalarse en el lugar de víctima, Vigna aclaró que no está interesada en ventilar detalles ni alimentar rumores. Sin embargo, dejó en claro que durante la relación vivió situaciones injustas y dañinas.
“Me hicieron maldades y pasó de todo, pero si las cuento termino victimizando y dándole vuelta al chisme. Hubo malos comportamientos”, afirmó. Con estas palabras, la artista busca cerrar el capítulo desde la dignidad, sin esconder lo que sintió.
Con estas declaraciones, Flor Vigna intenta poner punto final a un ciclo marcado por el dolor y la exposición mediática. Su testimonio, cargado de sinceridad y coraje, sirve como reflejo de muchas relaciones que, lejos de ser lo que aparentan, se convierten en espacios de conflicto y desgaste emocional.
Más allá de los nombres propios, su historia interpela sobre el amor propio, la incomodidad de los vínculos tóxicos y la necesidad de hablar para sanar.