Bruce Willis, ícono del cine de acción, fue diagnosticado en 2022 con afasia, un trastorno que afecta la capacidad de comunicarse. Ese diagnóstico marcó su retiro definitivo de la actuación.
Emma Heming Willis compartió detalles sobre la delicada salud del actor, diagnosticado con demencia frontotemporal. Aunque mantiene buena movilidad, su capacidad de comunicación se deteriora rápidamente. La familia se adapta a esta nueva etapa con amor, cuidados especiales y una forma distinta de comunicarse.

Bruce Willis, ícono del cine de acción, fue diagnosticado en 2022 con afasia, un trastorno que afecta la capacidad de comunicarse. Ese diagnóstico marcó su retiro definitivo de la actuación.
Al poco tiempo, su familia confirmó que la condición había evolucionado hacia una demencia frontotemporal (DFT), una enfermedad neurodegenerativa que impacta principalmente el lenguaje, la conducta y la personalidad.
Emma Heming Willis, esposa del actor y madre de dos de sus hijas, contó recientemente que la pérdida del lenguaje ha sido uno de los signos más devastadores del avance de la enfermedad. “El lenguaje se está yendo”, afirmó con pesar, al mismo tiempo que aclaró que Bruce conserva buena salud física y movilidad.
Aunque no se trata de una regresión lineal, la enfermedad presenta momentos en los que “el viejo Bruce” parece asomar, según relató Emma. Detalles como una sonrisa, una carcajada o una mirada especial siguen presentes de forma esporádica, y son muy valorados por sus seres queridos.
La familia ha tenido que adaptarse a esta nueva realidad aprendiendo a comunicarse de formas diferentes. Emma reveló que los primeros signos fueron sutiles: Bruce, conocido por su calidez y sentido del humor, comenzó a mostrarse más callado y distante en reuniones familiares, algo inusual para su personalidad.
A medida que el trastorno avanzó, la dinámica cotidiana cambió completamente. “Ya no se trata de hablar, sino de conectar desde otro lugar”, explicó su esposa. A pesar de las dificultades, Emma asegura que el amor, la paciencia y la empatía han sido claves para sostener el vínculo.
Ante el avance de la enfermedad, la familia decidió trasladar a Bruce a una segunda residencia cercana a su hogar, adaptada para brindarle asistencia profesional las 24 horas. La decisión, según explicó Emma, fue sumamente difícil, pero priorizó el bienestar emocional de sus hijas y la necesidad de un entorno especializado para el actor.
Aunque ya no comparten la misma casa todos los días, la familia se reúne con frecuencia: desayunan, cenan y comparten momentos que siguen alimentando el vínculo familiar.
Emma Heming Willis decidió canalizar su experiencia personal a través de un libro titulado The Unexpected Journey: Finding Strength, Hope, and Yourself on the Caregiving Path, que será publicado en septiembre.
En él, narra el proceso que vive como cuidadora, con el objetivo de ofrecer herramientas y contención a quienes atraviesan circunstancias similares con seres queridos que padecen enfermedades neurodegenerativas.




