Una embarcación de la Policía de Entre Ríos que patrullaba una zona de riachos frente a Villa Constitución (Santa Fe) fue atacada a balazos al mediodía del jueves, según informaron fuentes oficiales y medios locales.
Una patrulla fluvial de la Policía de Entre Ríos fue blanco de un ataque a tiros frente a Villa Constitución. Aunque no hubo heridos, la embarcación registró múltiples impactos y se desplegó un operativo conjunto para dar con los agresores.

Una embarcación de la Policía de Entre Ríos que patrullaba una zona de riachos frente a Villa Constitución (Santa Fe) fue atacada a balazos al mediodía del jueves, según informaron fuentes oficiales y medios locales.
El casco de la lancha sufrió al menos diez impactos de bala, pero ninguno de los efectivos resultó herido. En respuesta, se activó un operativo conjunto entre fuerzas provinciales y federales que continúa en curso.
Según el relato oficial, el hecho ocurrió mientras la lancha policial realizaba tareas rutinarias de patrullaje en el río Paraná y los riachos adyacentes. En algún momento, al intentar identificar a dos embarcaciones sospechosas, los ocupantes de estas respondieron con disparos contra la lancha.
La fuerza explicó que los agresores estarían vestidos con gorras, cuelleras y con el rostro cubierto, dificultando su identificación.
La embarcación policial recibió entre 10 y 15 impactos de bala, según distintas fuentes.
A pesar de la intensidad del ataque, afortunadamente no se registraron heridos entre los agentes que iban a bordo.
De inmediato se activó un amplio despliegue de seguridad. En el operativo participan la Prefectura Naval Argentina, fuerzas especiales, la División COE (Cuerpo de Operaciones Especiales) y unidades locales de la Policía de Entre Ríos. Un helicóptero del CODI despegó desde Paraná para colaborar en la búsqueda aérea, sumándose a los patrullajes acuáticos y los rastrillajes terrestres.
La zona de intervención es compleja desde el punto de vista geográfico: islas, riachos y meandros del Paraná ofrecen rutas de escape y dificultan la localización de las embarcaciones agresoras. Las fuerzas desplegadas concentran sus esfuerzos tanto en el agua como en territorios de la vecina provincia de Santa Fe.
Desde los primeros momentos, las autoridades vienen evaluando varias hipótesis sobre el origen de los atacantes. Una de las líneas apunta a que los agresores podrían haberse trasladado desde Rosario, aunque ese dato aún está bajo investigación.
La Fiscalía de Victoria, en Entre Ríos, quedó a cargo de las diligencias. Los investigadores coordinan con unidades de Santa Fe, con la Prefectura y con las divisiones de investigación criminal para articular los operativos en ambas márgenes del río.
Las primeras aristas de investigación señalan que los agresores serían un grupo compuesto por entre cinco y seis personas, que operaban en al menos dos lanchas civiles. Tras el ataque, huyeron por el río, impidiendo un contacto cercano que permitiera identificarlos.
Fuentes locales también plantean la posibilidad de que estos sujetos estuvieran vinculados con actividades ilegales en zonas ribereñas: pesca furtiva, tráfico fluvial o maniobras clandestinas en islas y cauces secundarios. En varios medios se especula que el ataque podría tener un carácter intimidatorio frente a controles que habitualmente despliegan las fuerzas en espacios insulares.
Este episodio no es aislado en la región. Recientemente, una embarcación de la Prefectura Naval protagonizó un enfrentamiento con presuntos cuatreros brasileños en la Isla Santa Lucía, en el río Uruguay, presumiblemente vinculados al contrabando o al abigeato.
Estos antecedentes agravan la preocupación de las fuerzas por la seguridad en sectores fluviales y ribereños, donde bandas organizadas parecen tener operatividad.
En el ámbito judicial se analizan medidas de protección, custodia y mayor coordinación interjurisdiccional. Se espera que los resultados del operativo permitirán reunir indicios —huellas, casquillos, rastros en embarcaciones civiles— para avanzar hacia la detención de los responsables.
A esta altura, las autoridades sostienen que, aunque todavía no hay personas detenidas, algunos de los agresores ya estarían parcialmente identificados y con posible vinculación territorial con Rosario y Villa Constitución.




