Un excursionista extraviado generó un incendio forestal al prender fuego para pedir ayuda en Jujuy
En la jurisdicción de Lozano, en cercanías del Parque Provincial Potrero de Yala, un hombre que se extravió en un cerro encendió una fogata para dar señales de su ubicación. Esa acción desencadenó un incendio forestal que afectó alrededor de 290 hectáreas de pastizal de altura.
Un excursionista extraviado generó un incendio forestal al prender fuego para pedir ayuda en Jujuy
Un hombre que se había perdido en las montañas de Jujuy prendió una fogata para intentar que alguien lo localizara. Pero ese fuego se escapó de control y provocó un incendio de grandes proporciones en el Cerro Azul, en la zona de Lozano, muy cerca del Parque Provincial Potrero de Yala. Las llamas consumieron cientos de hectáreas y movilizaron brigadas contra incendios, bomberos y técnicos provinciales y nacionales.
Origen del incendio y el rescate
El episodio comenzó cuando el excursionista —del que no se han divulgado aún los datos personales— extravió el rumbo en una zona de montaña de acceso restringido para el público general.
Para intentar dar aviso de su localización, encendió una fogata. Ese fuego se extendió hacia la vegetación circundante y desencadenó un incendio forestal que fue bautizado como “El Perdido”.
Se organizaron los operativos de rescate y combate de fuego.
Las primeras estimaciones oficiales señalan que el incendio consumió cerca de 290 hectáreas de pastizal de altura.
Las autoridades provinciales confirmaron que la acción del hombre fue la causa inicial del siniestro, y que se activaron las medidas legales correspondientes.
Tras declararse el incendio, se organizaron los operativos de rescate y combate de fuego. Las brigadas de la provincia caminaron durante seis horas para alcanzar el foco, guiadas por baqueanos locales, para contener los flancos y evitar que el fuego avanzara.
En un momento, se intentó relevar personal mediante helicóptero, pero la dirección del viento impuso limitaciones y solo fue posible hacer sobrevueltos de reconocimiento.
El hombre fue rescatado y puesto bajo custodia, mientras que se puso en marcha una investigación ambiental y administrativa para determinar sanciones por los daños provocados.
El incendio consumió cerca de 290 hectáreas de pastizal de altura.
Combate del fuego y consecuencias ecológicas
La lucha contra las llamas se centró en contener el incendio, aun cuando no estaba totalmente extinguido. Las autoridades detallaron que estaba “circunscripto y contenido”, aunque permanecía como amenaza latente.
Brigadistas del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, bomberos de la Policía provincial, técnicos del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) y voluntarios locales participaron del operativo.
Dadas las características geográficas del área, a más de 3.700 metros de altura en promedio, el acceso para tierra era muy dificultoso, lo que exigió desplazamientos a pie prolongados y apoyo logístico desde aire cuando las condiciones lo permitieron.
Se trazaron brechas cortafuego y se utilizó la técnica de “contra fuego”, estrategia que consiste en provocar un fuego controlado para que colisione con el foco principal y desactive su avance.
El impacto ambiental es considerable, sobre todo porque aunque la zona afectada no forma parte del Parque Provincial Potrero de Yala, sí colinda con él y ejerce una función de barrera ecológica.
La directora de Biodiversidad y Áreas Protegidas, Malvina Quintana, advirtió que el Cerro Azul es un cordón montañoso clave para muchas especies, y que el pastizal de altura afectado constituye un ecosistema sensible, hábitat de animales como la taruca o el cóndor andino, especies protegidas por normativa provincial.
Además, el siniestro moviliza posibles desplazamientos de fauna silvestre y daño a la flora nativa, que podrían tener efectos en cuencas hídricas, suelos y conectividad de los ecosistemas.
En el plano institucional, funcionarios adelantaron el inicio de actuaciones administrativas y medidas sancionatorias conforme a la normativa ambiental vigente.